miércoles, 7 de diciembre de 2016

Coronación K.E. Pequeñas lecciones de dignidad

Entre los más chiquitos, los dos torneos que compiten con motorización provis-
ta por la entidad fiscalizadora, tenían particularísmas definiciones. En Escuela, se
arribó con 25 puntos de ventaja a favor de un piloto (Borgert) por lo que sería un
trámite conseguirlo. En Promocional, la ventaja del victoriense Theo Firpo no
era tan amplia pero sí considerable. A los dos "oponentes" solamente les quedaba
una: ganar y no mirar para atrás, pues el resto de la historia no dependía de ellos.
La satisfacción más grande, fue que los chicos se lo tomaron muy a pecho. Eso
fue exactamente lo que hicieron Fulini y Casagrande: ganar, aún sabiendo que
el rival tenía todo a favor.

                    Ganadores: Agustín Fulini (Escuela) Juan Casagrande (Promocional)



Como decíamos el sábado, la presentación del Karting Asfalto Gualeguaychú a
pocos kilómetros, y la doble jornada- Coronación del Karting Río Paraná, en la
ciudad capital, atentaron contra el número de participantes de esta fecha.

Fueron 13 los chicos presentes la mañana del sábado en el sorteo de los motores.
Hubo una curiosa coincidencia, a Julián Berti (nro. 13) le tocó el motor nro. 13.
Las tres tandas tuvieron dueño, Agustín Fulini, con el chasis Jarno que le atiende
el MAF Racing de Mateo Maffioly.

Marcó 1' 07" 817 en la primera salida, en la que "Benja" Traverso estuvo a solo 068
Borgert a 1" 068, todavía sin alcanzar los 67 Km/h de promedio por vuelta. A pesar
de la alta temperatura, se trabajó mucho en todas las carpas para mejorar el rendimien-
to de cada kart.

La sensación térmica seguía subiendo al mediodía, y los tiempos se iban para arriba (o
como se dice en la jerga, empeoraban) Fulini 1' 08" 299 ahora con su rival a 494 y
Traverso a 1" 066. En sendos casos el cuarto había sido Uriel Schmukler, una de las
más grandes proyecciones para el 2017, cuando varios de sus rivales no estén más en
Escuela.

En la última oportunidad de probar retoques, con las nubes "llegando para quedarse"
en el cielo, sin que disminuya la sofocante y pegajosa canícula, también el diminuto
"Chapita" fue el mejor, bajando la barrera de los 67 segundos, con 1' 06" 991 (*) Fue
un cachetazo, porque el segundo mejor (Traverso) quedó a 489 y Borgert a 785. Uriel
a más de un segundo del kart celeste y blanco de Agustín.

(*) el mejor registro de todo el fin de semana,

Conocidos estos detalles, al lector no le deberá ser muy difícil adivinar quien hizo el
mejor tiempo en clasificación. Marcó 1' 08" 481 a 67, 289 Km/h bastante lejos de lo
mejor que había girado, pero le alcanzó para sumar otro punto. ahora "Manu" queda-
ba a dos puntos de la corona. No era gran cosa pero el impulso anímico que otorgó
al "gladiadorcito" fue fundamental.

La cortísima recta principal del circuito uruguayense permite achicar las diferencias
de las grillas, las largadas suelen ser caóticas y el ingreso a la primera curva, complica-
do. Eso si no hay un adelantamiento masivo, como ocurrió en el primer intento de
largada de la única serie. Dicho en otras palabras, la tan esperada serie fue a cinco
vueltas y no a cuatro, como correspondía. Para no beneficiar a Manu (le bastaba con
entrar cuarto).

Al principio Benjamín Traverso les quiso seguir el paso a la dupla- Fulini- Borgert.
Más atrás, Schmukler, con Juan Pablo Leonardelli detrás, al acecho.


Manu campeón x 4: Con Leandro Guimard en la grilla; inmediatamente luego de
la serie en la que se consagró, levantado por su padre Mauricio, y por último,
con integrantes de su equipo, familiares y otros rivales que se acercaron.



No lograba despegarse Fulini, a pesar del sinnúmero de recovecos, retomes, acelera-
das bruscas y cuatro cortas rectas con que cuenta el trazado. Los dos se despegaron de
Traverso en la tercera vuelta. Lo mismo había hecho Schmukler de Leonardelli, en
tanto que (cada vuelta más lejos) un interesante trencito, liderado por Valentín Coffy,
era lo más entretenido para ver, detrás de Juan Pablo.

En la cuarta vuelta, el griterío de la gente anunció un cambio en la primera colocación.
Borgert había encontrado el modo de superar al líder. En parte, la bandera que se agitó
en la zona del retome, tras la recta opuesta, pudo haber tenido algo que ver. Era de
aceite en pista, no amarilla.

La reacción de Fulini no se hizo esperar, recuperó la punta en el último giro y ganó la
serie. No pudo impedir que el segundo lugar del ramirense le bastara para desatar el
postergado festejo.

Por esas cosas inexplicables que tuvo una técnica a la que le costó bastante acomodar-
se a la categoría, el primer festejo "no valió"... recién después de la serie pudo disfrutar
toda su gente del merecido galardón. Fue casi, casi, como un "replay" (ver fotos).

La final, fue entonces (al barón de Coubertin le hubiese gustado tanto...) "pour le
sports" ya que todo estaba definido. Se largó en segundo orden de la tarde, después
de la final de la "C" que ganara Montañana.

Se retrasó Borgert en la largada (otra partida "loca") por lo que Fulini, Schmukler y
Leonardelli pasaron en las tres primeras posiciones. Bogert cuarto.

Para la segunda vuelta ya había recuperado el segundo puesto, lejos de Fulini que
aprovechó muy bien y se cortó. En la recta Coffy le gana la aceleración al chajarien-
se y se coloca momentáneamente cuarto, detrás de Schmukler. La final no ofreció
demasiadas alternativas en esta oportunidad.

Detrás de ellos, un trío conformado por Julián Berti, Nazareno López y Juan Manuel
Laplacette. Tal vez lo único interesante para ver.

En la cuarta vuelta "se contagian" adelante y forman otro trío: Traverso, Coffy y Juan P.
Leonardelli. Cerraban, mucho más atrás, los novatos Mateo Lang y Tomás Kern.

Se fueron distanciando entre sí, no tanto con respecto a Schmukler (3º) pero sí a
Traverso, alejado de la dupla Coffy- Leonardelli. Esto sucedía hacia la quinta ronda.
En la siguiente, Kern había liquidado el pleito con Lang, que quedó solitario colista.

Se defendían de su acosador Coffy y Berti, otra cosa parecida a una lucha no se observó
en aquella bastante aburrida final. Hubo en las dos últimas vueltas una ilusión óptica.

Todos creíamos que Borgert se estaba acercando, pero tras la "escalera" serpenteante de
la bajada de los mixtos, Fulini conservaba exactamente la misma distancia. Terminó
ganando por 2" 026

Uriel Schmukler completó el podio, cuarto Valentín Coffy, quinto Juan Pablo Leonarde-
lli, sexto Julián Berti, séptimo Juan Laplacette, octavo Nazareno López, noveno Tomás
Kern y décimo Mateo Lang, el hijo de Fabricio el expiloto de C.E.850.

Se quedó sin puntos Benjamín Traverso, desertor cuando faltaban tres giros para la bande-
ra a cuadros. Iba en el cuarto lugar de la hilera.

Así cerró este 2016 que dejó además del campeón, muchas promesas que seguramente
animarán con éste el próximo torneo, si es que la fiscalizadora no le otorga un permiso
especial para pasar a Promocional sin tener la edad mínima requerida. De venir de un
2015 en el que hubo pocos debutantes (que siguieran compitiendo) se pasó a este brillan-
te 2016, con toda una camada de chicos de los que algún día podremos decir con sano
orgullo "Aquí nació un campeón".


PROMOCIONAL: LA DIFERENCIA ENTRE LOS DOS FUE UN VUELCO

Juan Franco Casagrande dependia de una mala  -de una malísma- tarde de Theo Firpo, un
chico que sumó y sumó toda la temporada, aún en aquellos casos en que el motor que
le tocó en el sorteo no parecía estar a la altura de los más potentes (seguro que Néstor
Ducret, el motorista, enoja al leer esto. Pero es casi imposible lograr 20 motores con la
misma potencia) por lo que acertadamente, su equipo se dedicó a prepararle en mejor
chasis para el último compromiso del año.

El vuelco que sufriera Juan Franco en la práctica de los viernes (un mal necesario dicen
los pilotos) en Villaguay, que le impidiera correr la octava fecha, pesó demasiado en el
recuento final, más allá de que segunda mitad de campeonato de Theo Firpo fue
sencillamente brillante.

Las prácticas en Concepción empezaron con el dominio del larroquense. Ese 1' 06"
376 decía mucho más de lo que parecía. Tomi Pellandino a 389 y Omar Ríos -que
dejó Escuela definitivamente tal cual adelantamos- a 537. La nota la daba Fulini, en
sus primeros pasos en el arte de tirar cambios, con el qu tiempo,a 785 del mejor.

Segunda salida a pista, respetando siempre el orden pero con casi una hora de retraso.
error que la fiscalización subsanó al día siguiente. 1' 07" 309 atribuido al cambio del
clima, porque se estaba nublando de a poco y en todas las divisionales los tiempos
se fueron arriba.

Theo Firpo, a 637 era el más cercano al crono de Casagrande. Tercero Fulini a 733 y
cuarto Genaro Riedel a 1" 078. Más de uno volvió a la puesta a punto original, este
circuito obliga a una elección "balanceada" debido a la variedad de curvas.

Quedaba solo una oportunidad más, la tercera tanda, pero tampoco pareció que hayan
dado en la tecla. Tomás Pellandino con 1' 08" 271 estuvo en la parte más alta de la
planilla. Omar Ríos a 815, Riedel a 981. Poco y nada para rescatar; Firpo a un segundo
clavado.

La pole de Casagrande, comparado como venían, fue algo magistral. 1' 05" 618 a 70,
225 Km/h le hizo ganar un punto, recortando la diferencia que le llevaba Theo a 10
puntos. Pellandino a 180, Firpo a 595 y Riedel a 596 iban a ser los opositores, El
resto, a más de un segundo, en teoría no estaba para ganar.

Largada la serie, Firpo supo colocarse escolta en la primera vuelta. Omar Ríos desde el
cajón 5 se puso tercero, cosas que suceden en los primeros metros. Posteriormente "todo
vuelve a la normalidad" parafraseando a un conocido futbolista nacido en Ciudadela.

Mientras tanto disfrutábamos de un hermoso trencito de seis, en el que el único que se
había distanciado un poco era el líder Casagrande. Se recuperaba Pellandino en la terce-
ra ronda, quedando tercero "acompañado" en los sobrepasos por el chajariense Rausch.

Ríos "desaparecía" de entre los primeros, "ayudado" por una maniobra de Riedel, que la
autoridad castigaría al final de la batería. Rodrigo Gurnel y Juan P. Torreta seguían en
la suya, detrás de Rausch. Al de Villa Elisa le aplicarían cinco segundos de recargo.

Riedel se venía desde atrás, desde el incidente con Ríos, superando al villaguayense
en la vuelta 4 para ponerse sexto. Finalmente fue quinto Torreta, ante las sanciones a
Gurnel y Riedel.

El éxito de Casagrande significó 9 puntos de ventaja para Firpo (escolta) y la elimina-
ción -casi cantada- de Tomi Pellandino (tercero) de la lista de aspirantes al título. ¿Más
claro aún? Un cuarto puesto en la final, le alcanzaba al victoriense, por más que Juan
Franco ganase de punta a punta.

Redactar sobre la final se hace sencillo porque fue un calco de la serie, solo que a 10
vueltas. Casagrande se escapó desde los primeros 500 metros. Eso fue todo los que
necesitó. Terminó a siete segundos y fracción de su perseguidor. un promedio de 7
décimas más veloz por vuelta. Queda todo dicho.

Un tanto extraño fue el primer paso, porque Iñaki Arrias, que había salido en el cajón
seis, pasó escolta. Pellandino y Firpo a continuación. Largada "tranqui" del futuro
campeón, sin involucrarse en tontos toques, porque debía llegar.

Torreta y Barreto quinto y sexto, otro indicio de anormalidad, puesto que el uruguayen-
se había salido sexto. sin embargo, para la segunda vuelta ya se ordenaron las posicio-ç
nes del podio. Pellandino y Firpo dejaron atrás a Arrias (4º) al que se le venía Juan P.
Torreta. Un poco más atrás, el de soberbia escalada, Facundo Latute, en el sexto lugar
(que ocuparía por espacio de cuatro giros) al frente de un espectacular pelotón de siete
karts en hilera.

En la tercera vuelta, Torreta dejó atrás a Arrias, capturando el cuarto lugar. La paridad
estaba de regreso, lástima que del cuarto lugar para atrás.

Luca Rausch superó a Barreto en la cuarta ronda, trepando a la séptima colación en la
fila, tras una primera vuelta para el olvido, que lo había dejado undécimo. En al siguien-
te, Torreta se separó un tanto del pelotón, que encabezaban Iñaki, Latute y Rausch.

Hasta la sexta vuelta duraron los intentos de Theo Firpo de ir por Tomi Pellandino. Se
convenció que no iba a poder, optando por conservar esa tercera posición, lejos del
cuarto. Había que pensar en el campeonato y cuidar el pie derecho, tal vez lo más
difícil de entender para un piloto, y más con la alta temperatura reinante.

Con toda la recta principal de ventaja para el líder Casagrande, era hora de mirar un
poco más atrás si se iba recuperando el cuarto en discordia, Genaro Riedel. En la
secta vuelta lo encontrábamos todavía en una oscura novena colocación. Venía
acosando a Ríos, éste a su vez se esmeraba por llegarle a Rausch.

Dos imágenes del campeón. En Villaguay (8va.) y el domingo, en el Coronación,
antes de largar las finales. Revirtió un discreto arranque del año el victoriense.



Al fin se alteró el orden en la séptima, cuando Rausch pudo con Latute, en tanto el
resto de aquel que fuera un lindo pelotón, se componía de Fulini, Barreto y Gurnel.
Cerraba Diego Stivanello.

Siguió perdiendo terreno Latute en la octava, lo alcanzaron Ríos y Riedel. Por su
parte, unos metros más atrás, Gurnel lo tenía a tiro a Fulini. Entraron en la novena
vuelta juntos.

Ese bloque se modificaría en el último giro. Ríos superó a Latute y Gurnel a Fuli-
ni, en una última vuelta interesante del sexto para atrás. Riedel perdió dos puestos,
se cayó Latute, que cedió cuatro, todos sobrepasos ocurridos en la parte alta del
circuito, muy lejos de nuestro punto de observación en la línea de largada.

Sin ninguna otra novedad cayó la bandera a cuadros, y solamente levantó los bra-
zos el tercero Firpo (campeón) Casagrande ganador, segundo Pellandino. Cuarto
Torreta cerrando un muy buen año de aprendizaje, quinto Arrias, sexto Rausch,
séptimo Omar Ríos -valen para él las mismas palabras que para Torreta- octavo
Rodrigo Gurnel que había pasado último en la primera vuelta, noveno el novato
Agustín Fulini y décimo Genaro Riedel, que en definitiva no ganó este año. Un
materia pendiente que seguramente aprobará en el 2017.

Promocional ha tenido el mejor año desde su creación, con motores 110 de tres
cambios. Esperemos que mantenga el nivel y siga proyectando pilotos que más
que promesa son una realidad, como el campeón y subcampeón, dicho sin
desmerecer a ninguno de sus animadores. El aplauso, claro está, es para todos.


@AleSpizzirri








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