viernes, 27 de octubre de 2017

Karting: Para la próxima, dos ya tendrán su título

Fueron 136 los karts presentes en la octava fecha en Concepción del Uruguay,
circuito que probablemente sea visitado para el Coronación, en noviembre. En
este duro momento en el que las prioridades han pasado a ser otras, mantener
el parque es la única aspiración de casi todos lo dirigentes de categorías de la
provincia.

Grilla de la final más polémica de la tarde, aquel 15 de octubre. A tal punto que aún no sabemos si ganó Ahibe (19) o
Fiorotto (26). La única certeza fue el despiste que dejó sin chances a Todone (1) en la curva 1.



Queremos destacar además, que la ausencia de pilotos en la 125 Light es
por obra y arte de las propias decisiones de la categoría, que dejará de lado a
los afamados motores Zanella y sus sucesores (Surumpio, Sapucai, etc.) desde
la próxima temporada, aniquilando años de inversión y desarrollo, más que por
el momento económico.

Y lo peor. No hemos visto en acción aún al motor sucesor (que será el mismo
de la Inter pero con menos potencia) como se prometiera en una reunión
llevada a cabo en Villaguay, no hace mucho tiempo atrás. Al César lo que es
del César y a Dios lo que es de Dios.

Vamos a ir narrando y comentando las finales de la octava en Concepción,
empezando por los más chicos, como es nuestra costumbre.


BENJAMÍN, VIRTUAL CAMPEÓN DE ESCUELA

El sábado ocurrió lo inesperado. Benjamín Traverso no salió a clasificar, por
lo que se le escapó el punto por la "pole position". Ese punto fue a parar a la
cuenta del único rival matemático que tiene el correntino: Julián Berti, el gran
dominador del fin de semana.

Y curiosamente, ese punto es el que le falta para consagrarse con todas las de
ley campeón 2017 de Escuela. En la práctica, la diferencia entre el pequeño
piloto de Esquina y el resto, hace que el faltante sea un mero trámite. Le basta-
ría con entrar décimo en la final, incluso con dos vueltas perdidas, para ser
campeón. Lo que probablemente no ocurrirá, porque el chiquito está en "modo
ganador". Será campeón en la clasificación o en la serie del Pre Coronación.

En un circuito que para los más chiquitos resulta extenuante, el segundo mejor
del sábado era Ayrton Pérez, a 243 y tercero Uriel Rodríguez a 247. Linda
paridad, aunque ya sabemos que las PC no tienen mucho que ver con la carrera.
Entre una y otra hay un detallecito llamado ritmo.

Prueba cabal de eso fue la serie. Resultó extraño verlo largar a "Benja" desde el
último cajón (duodécimo) por lo que la atención se desdobló en la punta -que
siempre fue de Berti- y lo que podría hacer el correntino atrás.

Promediando el primer giro estaba noveno, y en los restantes cuatro superó a
otros tres. El que más le costó fue el santafesino Matías Druetta, que regresó
tras su debut en Paraná.

No fue una batería emocionante pero los chiquitos están disculpados. Se podría
explicar fácil, si recordamos las palabras de Mika Häkkinen sobre Magny-Cours:

"En estos circuitos trabados, uno tiene la impresión de que la máquina
es más importante que el piloto. Digo, por más que uno haga una vuelta
perfecta, sin errores, la máquina será la determinante."

 Resumido: ganó Berti, segundo Pérez aguantando a Rodríguez, cuarto Manuel
Cergneux, quinto Tomás Arosio resistiendo los embates de Traverso (llegaron
a la par pero Bejna no sumó ni un punto) séptimo Druetta, octavo Mateo Lang,
noveno Tadeo Basconcellos, décimo Agustín Gabioud, undécimo el novato (por
primera vez en CdU) santafesino Marco Fenoglio y duodécimo el debutante,
rafaelino en este caso, Nereo Cipolat. Apellidos que a los más duchos refieren
casi por reflejo al TS 850, aquella categoría que era "el espejo" donde se miraba
nuestro TC 850.

La final mostró algo bastante parecido. Julián Berti (ahora con chasis Jarno) que
tiene asistencia del MAF de Mateo Maffioly hizo lo que quiso, desde el primer
giro, en el que ya estaba algo cortado del resto. Fue aplastante. Los 5, 882 seg
de diferencia significan algo así (promedio) como medio segundo por vuelta más
veloz que su inmediato perseguidor.

Liquidada de antemano toda lucha por la punta, quedó mirar hacia atrás, para
ver si Traverso progresaba desde el quinto lugar, porque hizo una interesante
primera ronda. Dejado atrás a Arosio, fue por Cergneux, quien sería su última
"víctima fácil". Uriel también se había distanciado de ellos (aunque el líder en
cambio, seguiría ampliando la brecha sobre Uriel) por lo que a Benjamín le
costó mucho más de lo esperado acercarse a Pérez. Y Cergneux lo seguía de
cerca, muy de cerca, como diciendo "no está todo dicho todavía".

Pero lo anticipó bien Traverso a Pérez en la chicana 1, cuando el paranaense
se abrió de más a la salida de la curva 2 y pisó la parte menos limpia del asfal-
to. A la curva 4 llegó antes el correntino. Iban dos vueltas.

Transcurrieron dos vueltas más, con Cergneux desesperado por llegarle a Pérez.
Con Traverso probando los límites de un kart que no tuvo un sábado entero de
puesta a punto, y a eso lo pagó caro. No le pudo llegar a Uriel Rodríguez.

Es más, daba la impresión de que si le llegaba, no tendría resto para ensayar una
maniobra. Ergo, el tercer lugar era buen negocio.

Esta interesante victoria de Julián llegó un poco tarde, con dos fechas por delan-
te y cero chances de llegar a una instancia mano a mano con el correntino. Si
todo sale como está previsto, habrá un campeón en la próxima. Berti, Rodríguez y
Traverso subieron al podio en CdU. Pérez cuarto, quinto Cergneux, sexto Arosio,
séptimo Mateo Lang, octavo Marco Fenoglio, noveno Tadeo Basconcellos y déci-
mo Matías Druetta.

Agustín Gabioud y el santafesino Nereo Cipolat (debutando en el K.E.) arribaron
a continuación. El torneo: Traverso  ,Berti,


PROMOCIONAL: FULINI, AHORA O NUNCA

Era la oportunidad de aplicar todas las bondades del chasis y lucirse ante su gente.
Agustín Fulini viene soportando la arremetida de Tomi Pelladino, y se dio una vez
más una intensa batalla entre los dos grandes candidatos de Promocional.

"Chapita" empezó marcando la pole, con 387 de brecha a Pellandino. Lo que más
nos gustó de las tandas sabatinas fue el tercer registro de Juan P. Torreta, que de
esa manera demostró que lo de Villaguay no fue casualidad. Viene progresando
el hijo de Dante, fecha tras fecha.

Nada hizo suponer lo que sucedió en la serie. Fulini no logró distanciarse de Tomi,
siendo la definición por el triunfo casi el único entretenimiento, ya que recién por
el sexto lugar y más atrás, hubo algo diferente para ver. La hilera del segundo al
quinto no tuvo variantes.

En la tercera vuelta se le hizo insoportable la presión a Fulini y Pellandino pasó al
frente en la corta recta que lleva desde la salida de la chicana al retome antes de
entrar a los mixtos en bajada. Los roles se invirtieron, siendo lo más curioso para
observar como repetían las trayectorias maquinalmente, a pesar de su corta edad.
Cada cual con su libro.

No se distingue porque fue tomada desde muy lejos (talud). Agustín Fulini pasa luego de ganar, enfrente a su mini hinchada.


Así, se llegó a la bandera a cuadros, con apenas 088 de luz entre kart y kart. El
colonense le descontó un punto en el campeonato. Tercero entró Torretta, cuarto
Juan Laplacette, quinto Uriel Schmukler y sexto Valentín Coffy.

Con semejantes antecedentes, se esperaba que en la final se repita la historia. Pa-
ra regocijo de los espectadores, así fue. Fulini sabía que tenía que hacer "buena
letra" en la vuelta inicial, para no permitir que Pellandino gire cómodo. El viejo
truco de pegar primero.

Nada de paz. Cada cual tenía su sector, y el que más le cuesta a un motor de Promo
es la subida hacia la curva 5, el retome de entrada a los mixtos de la parte alta. No
obstante, en C. del U. hay que salir muy bien armado  de la ese que forman las
curvas 3 y cuatro, de la mal denominada "chicana 1". El "hamaque" debe ser perfec-
to, para que el motor no pierda vueltas. Caso contrario es casi imposible poder
"tirarse" en la subida. Palabras más, palabras menos, lo dicen todos los pilotos. En
la Promo, como quedó dicho, es fundamental. Para colmo se trata de un curvón
hacia la izquierda, que los pilotos hacen a fondo como si fuese recta. Apenas se
"endereza" ¡zas! hay que frenar.

Fulini perdió el liderazgo, que recuperó en el segundo giro. Desde entonces, al
cumplirse la tercera, Pellandino quiso hacer diferencia. El espejismo duró menos
de tres giros. En la quinta, ya estaba Fulini a la cola otra vez, y la maniobra se
repitió. A la parte alta entró primero el local. Entonces fue el turno de "Chapita",
que tampoco pudo hacer diferencia. Entraron en la séptima muy juntos otra vez,
el sorpasso era inminente.

El de Colón pasó al frente en la octava y esta vez pareció definitivo. La pequeña
luz de ventaja podría llamar a engaños visuales. Ya había ocurrido ¿Porqué no
esperar hasta la última vuelta?

Con Laplacette muy lejos, girando cómodo en la tercera colocación tras haber dado
cuenta de Torreta en la vuelta 1, entraron el el último giro. Fulini pegado al paragol-
pes del kart de Pellandino, otra vez a fondo en el sector de la "chicana 1" (justo
en el lugar que los pilotos veteranos nos habían reportado mucha arena) y pegar en
el momento justo, en una maniobra que por más que se repita, siempre será un lujo
para los ojos -más aún cuando la hacen los jovencitos- por el envidiable "timing"
que ponen en manifiesto.

El resto del último giro es obvio contarlo, con Fulini adelante sin dejar el más
mínimo resquicio, para recibir la bandera a cuadros 685 milésimas antes que Tomi.
Laplacette disfrutó del podio, muy bien ganado por su ritmo sin claudicaciones.

La pelea por el cuarto lugar entre Torreta y Schmukler (los dos, hijos de pilotos de
TC Pista, paradójicamente) tuvo como ganador a... ¡Nazareno López! Estuvo muy
atento, cuando se entreveró entre ellos, dejándolos atrás y distanciándose lo
suficiente -en la segunda mitad de la final- como para decir que fue la labor más
sólida que le vimos.

Torreta (quinto) finalmente prevaleció sobre Schmukler (sexto) en el décimo giro,
a uno y fracción del final. Séptimo solitario entró Valentín Coffy.

Párrafo aparte, para el delicado momento que se vivió en la cuarta vuelta de los
punteros. El despiste y vuelco de Dante Moreira, que afectó el hombro y una de
las muñecas del pequeño volante, ocasionó una de las polémicas de la jornada.

¿Porqué no se la detuvo? Pues, porque el comisario tiene comunicación por radio
con el cuerpo de banderilleros. Los que estaban asignados a ese sector, atendieron
al santafesino con la premura del caso. La ambulancia llegó pronto y se constató
que no tenía lesiones de gravedad.

Como en Concepción la ambulancia puede hacer un trayecto para salir del circuito
sin afectar el desarrollo normal de una competencia, nos pareció acertada la medi-
da del Sr. Pinget y sus colegas.

El programa tenía retraso, siendo que faltaban aún dos finales por disputar, y la
candente disputa de la punta se hubiese visto afectada, generando más de un
(probable) encontronazo con los progenitores o jefes de equipo.

A nadie le gusta pasar por estos angustiantes momentos. A todo padre se le cruza
por la cabeza que el mundo debería detenerse hasta que se compruebe con todo
rigor si no hubo -por ejemplo-  fracturas. Debe primar el sentido común, puesto
que en nada hubiese alterado la situación de Dante si la final se detenía. Al menos,
esta es nuestra humilde opinión.


@AleSpizzirri



No hay comentarios:

Publicar un comentario