Una accidentada apertura se vivió esta tarde en el Autódromo de Concordia,
con la victoria de Gastón Dubois sobre el Chevrolet Celta que atiende el
Pierini Competición. La final fue relargada por el accidente de Ricardo
Garnier, y posteriormente tuvo un interrupción por una carambola entre
tres, que motivó dos vueltas del Auto de Seguridad (AS) cuando el astro
rey iba en busca del horizonte, para así completar la primera jornada.
El de Colonia Mabragaña fue el dominador desde los primeros ensayos,
condición que conservó hasta las pruebas de clasificación. Sin embargo, fue
Alejandro Pellegrini el autor de un primer giro memorable, en el que apareció
delante de todos, pero no se pudo mantener por un extraño despiste.
Heredó la punta Dubois, acosado por el campeón Walter Giovenale, que le
birló la posición justo cuando metros más atrás, Fernando Roude entraba en
trompo en el curvón, siendo imposible pese a su notable intento poder esquivarlo
a Ricardo Garnier. El tremendo golpe en la zona del guardabarro delantero izquier-
do catapultó al Fiat Uno azul que comenzó a dar una serie de tumbos que realmente
impresionaron en un primer momento.
Se detuvo con roja la final, tomando en el mismo momento la decisión el Comisario
Deportivo de anular las cuatro vueltas disputadas. Se trasladó al dolorido piloto a
un centro asistencial, en donde continuaban los exámenes de rigor al momento de
abandonar este cronista el predio, a las 19: 10.
Cuando se volvió a largar, ya pasadas las 18 y 30, Giovenale se lució al frente de
un apretado trencito que integraban Orellana, Javier Huerta y Gastón Dubois, todos
integrantes de un mismo equipo, aunque Dubois tenga su propio dúo de mecánicos.
La batalla Orellana vs. Giovenale ser reeditó, culminando en otro extraño inciden-
te, cuando "el Puma" le ganara la cuerda en la última curva, pero el campeón dobló
por afuera como si no se hubiese dado por vencido, y como resultado del violento
toque, el Duna se cruzó, quedando también detenido en la cama de tierra, además
de Giovenale y Orellana el Fiat Uno rojo de Javier Huerta.
Rostros muy serios y respetuoso silencio al ver el estado del Fiat Uno de "Calo" Garnier. Los "pozos" de veinte
centímetros de profundidad que quedaron en la "banquina" interna del curvón "hablaban" por sí mismos.
Una vez que el rescate los sacó, tras dos penosos giros, Ricardo Brugada fue por el
segundo lugar de Gustavo Francois, que hizo rescatar del olvido al Fiat Palio con
el que alguna vez se luciera Walter Barbieri, pero no pudo contralar una tendencia
a deslizarse en la última curva, apretándose los dos por la cuerda mientras por
afuera el brillante Alejandro Pellegrini (había partido undécimo y último) se hizo
del segundo lugar.
La batalla "fraticida" le hizo sencillas las cosas a Dubois, que ganó por amplio mar-
gen, en tanto el uruguayo Renzo D'Acosta intentaba molestar a Brugada, pero a pesar
de su tesón, no logró superar al Fiat Uno plateado motorizado por Julio Galeano.
Posiciones extraoficiales de la primera final: Ganador Gastón Dubois, segundo Ale
Pellegrini, tercero Ricky Brugada, cuarto Renzo D'Acosta, quinto Héctor Prelat y
sexto Gustavo Francois, el último en arribar, a las 18:50.
Frustrado debut del paranaense Marcos Ruhl con un Duna.
Los karts hicieron prácticas, reuniendo 23 pilotos, entre ellos tres damas, Tiziana
Tischler (Escuela) Ornela Villanova (150 cc "A") y Mariana Panozzo Zénere (110 cc).
@AleSpizzirri
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