Ahora vamos a analizar, como lo prometimos, los sucesos
acontecidos en el segundo intento de largar a los 36 chicos de la
150 Junior "A" en la tercera fecha de C.E.K. corrida el 8 de agosto
pasado en Concepción del Uruguay. Como esta página se caracteriza
por opinar pero también por proponer, en los primeros párrafos les
vamos a formular nuestra humilde propuesta de solución, porque
entendemos que se trató de un error conjunto y seguir buscando un
culpable o "cabeza de turco" es erróneo.
La improvisada reunión en la línea de largada que la televisión no mostró. Enorme gesto delYa narramos lo que aconteció en el "ANTICIPO" por lo que no lo vamos
a volver a escribir. Solo ampliaremos algunos detalles. De inmediato, lo
que haremos es contrales de una Fórmula española de reciente creación que
es el primer peldaño de los exkartistas hacia cosas mayores. No es exacta la
comparación (algunos lectores pidieron una comparación con los campeonatos
FIA karting de Europa, que también miramos) pero sirve. Se trata de la F4
Spain. Sí, una F4 en España donde el idioma usual es el inglés.
La largada, después de la vuelta previa, consiste en el prendido secuencial de
al menos cinco luces rojas en una semáforo horizontal. Una vez prendido el
quinto o el último, se apagan dando inicio a la carrera. Cada una de las filas
tiene un banderillero con sus respectivas banderas amarillas y en caso de
encontrarse con una máquina detenida, se agitan todas a la vez como
mostramos en la captura de pantalla de más abajo.
Esta imagen no resiste la menor comparación. En nuestro karting provincial,
detrás del muro o del alambrado hay público listo para filmar las largadas
con su celular, pero solamente dos oficiales en la grilla y un banderillero en la
curva 1. Trate de reflexionar, 3 auxiliares de pista para controlar 36 karts con
36 jóvenes impetuosos listos para hacer "la gran Alonso" frente a las cámaras
de la TV en vivo. ¿Qué puede fallar?
Creo que con esto esta todo dicho. Nuestra propuesta es clara y contundente.
Pero mejor vamos a analizar cada una de las cosas que se escucharon durante
la tercera fecha y unos días más tarde, cuando lo ánimos estaban más calmos.
Tal vez la mejor opinión vino de parte de un concurrente uruguayense. Joven
pero con mucha experiencia y no solamente en el CEK:
"En primer lugar te diría que fueron muchos errores juntos, demasiados"
Nos tomamos el trabajo de escuchar (y leer) todas las opiniones, las quejas y
las propuestas que nos llegaron la semana pasada al respecto. Y con esa base
podríamos aplicar el método que inventaran los grandes sabios griegos. A
cada argumento lo vamos a analizar y refutar, para confirmar lo que afirma-
mo en el encabezado de esta nota: Nos equivocamos todos.
1- "El Comisario Deportivo debió haber dividido el parque en dos finales"
Cuando se anunció que largarían los 36 juntos no se pudo escuchar ninguna
queja. No nos consta que alguien se haya presentado a reclamar. Ninguno es
brujo, ninguno tenía previsto que su hijo o pariente se quede detenido en la
largada de una "hipergrilla"... que es exactamente lo que ocurrió, una eventuali-
dad que puede pasar en cualquier categoría del mundo ¿No es así?
Acá vamos a ser sinceros. Nos pareció bárbaro que largen los 36 juntos. No lo
vamos anegar ahora. No seríamos fieles a nuestra postura, que nos ha creado
tantos "rivales" (enemigos es una palabra fea) porque en los tiempos que el
CEK juntaba 200 o más karts lo dijimos. Series eliminatorias como en cualquier
otra gran categoría del mundo, finales únicas con el máximo admitido para
cada circuito. Así se hace en Europa, en Estados Unidos, etc. Se presentan casi
100 postulantes, largan 30 y el resto lo intentará en la próxima fecha.
Algunos en Sudamérica hacen una "Final consuelo" (sin puntos o con puntaje
muy reducido) pero eso es harina de otro costal. Ese domingo teníamos a los
muchachos de la TV trabajando. Cuanto menos se demore, mejor les iría pues
el televidente no se aburre, se aleja la posibilidad de hacer "zapping" o bien
cambiar para ver el TC en el Villicum y adiós karting tardón. ¿Sí o no?
Entonces la idea de hacer una sola final nos pareció buena. Ya lo habían
hecho los de la 150 "B" que si bien son un poco más experimentados,
tiene bien ganada la fama de revoltosos. Y no había pasado nada de otro
mundo.
Daniel Pinget pidió públicas disculpas por lo que se interpretó como un
"error de apreciación"... se retractó y anunció que se iban a hacer dos
finales. Se intercambiaron opiniones (algunos lógicamente estaban muy
exaltados) se dejó en claro algunos aspectos.
Conclusión 1: Si el Comisario Deportivo se equivocó, fue porque nadie
previó el desastre. Queda la experiencia para futuras largadas, pero
también deberíamos tener en cuenta que cada padre o concurrente es
co-responsable de los actos. Porque cada padre deposita en la autoridad la
delegación de la toma de decisiones y en el mismo momento de dejar a su
piloto en el cajón de la grilla, es co-responsable de lo bueno o de lo malo
que el piloto pueda realizar. Y que se le detenga el motor en el cajón en el
momento de la largada, admitámoslo de una buena vez, no es por culpa
del Comisario Deportivo.
2- "Lo del largador fue un desastre. Muy grave"
Cada Comisario de largada tiene su propia manera de largar. En el caso del
sr. Néstor Baccon (ya lo dijimos en una nota sobre el adelantamiento de
Eduardo Landi en Villaguay, nota en la que publicamos como prueba un
video en "slow motion" y todo) al procedimiento le agrega su propia
impronta, que es levantar el cartel de 3 segundos y de inmediato apagar la
luz del semáforo dando inicio a una competencia.
Tan automatizada tiene esa forma de largar, que el pícaro Landi hizo la
cuenta y acertó. Largó apenas milésimas antes, se adelantó pero solo los
pilotos que estaban en su fila o detrás lo advirtieron. Para el resto de los
mortales (sin camarita y sin casco) pasó desapercibido.
Baccon hizo exactamente lo de siempre. Los chicos que se quedaron deteni-
dos lo desesperaron. Tomó la bandera amarilla (Pato, el banderillero de la
curva 1 reaccionó al instante, se anticipó a todos) y dio unos pasos a toda
carrera tratando de remediar lo inevitable, los de atrás se llevaron por
delante a los que estaban parados.
Es fácil decirlo después, pero el Comisario de largada hizo lo mismo de
siempre, solo que algunos karts se quedaron parados y los pilotos de
atrás o no lo vieron, o ignoraron las amarillas. (¿Cuántas amarillas había
flameando? ¡Esa es la cuestión!). Muchos de los que vimos quejarse del
"grosero error del largador" pueden haber sido los mismos que en otra
oportunidad se quejaron de los que "no levantan" por ejemplo en el fatal
accidente de Fineschi, que luego tuvo muchos pilotos suspendidos.
Estamos seguros que ellos no aceptarían una suspensión de su piloto por
"no haber levantado" en esta largada. ¡Cuidado!
La polémica sería interminable. Ortelli que es profesional debió levantar,
pero mi hijo que es amateur, no. Y así podríamos seguir hasta el infinito, en
un bucle que nos lleva a nada.
Por último queremos destacar un detalle en el que nadie reparó. Si el sr.
Baccon se quedaba piola bajo el semáforo agitando la amarilla, tal vez
el descontrolado kart no hubiese impactado sobre su humanidad. Sus
reflejos impidieron que le diera de lleno, en tal caso las consecuencias
hubiesen sido gravísimas.
El largador quedó tendido en el suelo, lo ayudaron a recuperarse pero al
hacerlo se negó a subir a la ambulancia, porque en ese momento estaban
atendiendo sobre la pista a Diego Gevera, que fue inmovilizado y luego
trasladado para su mejor evaluación. Segundo día consecutivo de uso de
la ambulancia. Entonces,
Conclusión número 2: Si el largador se equivocó, pagó bien caro su error
arriesgando la vida por los chicos. Y ninguno de los que luego lo defenestró
movió un dedo durante el incidente, que no sea para maldecir.
3- "Este circuito es peligroso en la largada, la curva 1 es muy cerrada"
Este argumento se refuta con facilidad. El desorden en la largada es una
probabilidad. Primero: en Concepción del Uruguay se llevan largadas una
centena y media de carreras de karting, en pocas hubo incidentes. En el CEK
solo recordamos algo parecido, cuando se produjera una montura sobre los
neumáticos del kart anterior al llegar varios karts a la vez al frenaje, en una
de la 125 Internacional cuando el desafortunado protagonista fue un debutante
(Pagola) sin antecedentes con motores de potencia.
¿Es peligroso? De ninguna manera. Es un circuito muy bien pensado, de
pavimento impecable, que ese fin de semana estuvo bien presentado (un
aplauso para la Comisión que también cortó las malezas del talud, que antes
impedían ver el paso por la recta opuesta desde boxes) la curva 1 está bien,
ni cerrada ni abierta. Una curva 1 más abierta incita a los pilotos a encararla lo
más rápido posible. Una demasiado cerrada, si bien propicia los sobrepasos,
podría traer inconvenientes en las largadas.
Estado del kart de Diego Gevera tras el impacto y el vuelo. No se aprecia en la foto, peroSegundo: Parece una estupidez pero no lo es. Menos en Gualeguay que es en
pendiente en bajada, las largadas en el karting entrerriano se hacen en subida.
Esto significa que los últimos de una larga grilla de partida quedan ocultos a
la vista del largador, situado varios metros delante de la primera fila. En
Concordia hay una casilla elevada que salva esa dificultad, pero ni en Paraná,
ni en Concepción, ni en Villaguay ni en Gualeguay el auxiliar que larga
cuenta con esta ayuda (inclusive en Paraná hay quienes largan en curva y
eso sí es peligroso). Cuando el auxiliar de largada (el sr. Juan Carlos Otero,
en el caso puntual de la largada que estamos analizando) sube la bandera
verde habilitadora, la carrera se larga y todo lo que ocurra entre los 150
metros que hay entre la línea de largada y el último karts queda supeditado
a la habilidad de los pilotos y a la buena de Dios.
¿Tan difícil es admitirlo?
4- "En la primera vuelta se debería prescindir de esta chicana"
Esta fue una de las opiniones más disparatadas que pudimos apreciar en los
candentes minutos de desconcierto, mientras al sr. Baccon le pedían que se
sentara. Un concurrente de Concordia le acercó un poco de agua mineral.
Otro (paranaense) le preguntaba si estaba bien y se quedaba con él unos
minutos más. El propio C.D. Pinget se hizo cargo de las largadas desde ese
momento y hasta el final del programa. No es bueno que el director de la
prueba sea a la vez largador, pero digamos que dadas las circunstancias,
hubo un enroque de funciones, mientras el sr. Baccon se recuperaba de su
"estado de shock" por el terrible golpe, que aún hoy exhibe en su cuerpo
con la forma de un gran moretón.
Lo de prescindir de la "chicana" (para nosotros, curva 1 y 2, pequeñísima
recta y de inmediato curvas 3 y 4) es un disparate. Está diseñada para que
los karts no lleguen a excesiva velocidad al curvón que es la curva nro. 1
de todos los circuitos para autos de turismo y de fórmula.
Si los karts lanzados en la primera vuelta, con la diferencia de velocidad
ya desplegada en su totalidad, pasasen directo de la largada al curvón solo
estaríamos postergando unos metros más adelante la posibilidad de
incidentes, con la desventaja de que éstos serían a mayor velocidad y por
ende, mucho más peligrosos.
Opiniones, horas después del desastre
"En mi opinión hubo negligencia. Primero, se debió haber disputado dos
finales de entrada. Segundo, negligencia de los comisarios de largada.
No prestaron atención que había dos pilotos que estaban avisando que
tenían un problema en su máquina, pero así y todo largaron la carrera"
"Hay un video en las redes donde se aprecia al quinto de la grilla, que no
recuerdo en este momento quién era, levantando la mano"
"Te lo voy a decir en pocas palabras: ayer Dios estuvo de nuestro lado"
"Lo que pasa Ale, es que son muy jóvenes y no hay docencia en las
autoridades. No hay más reuniones previas donde se los eduque, se les
recuerde qué maniobras están permitidas y cuáles no, por ejemplo. En
un tiempo con (el comisario deportivo de origen cordobés) Ogier se
las hacía, ahora no sé. Te digo con sinceridad, no sé de que se habla
ahora en las reuniones previas. La del sábado no duró ni cinco minutos"
Coincidimos con esta última opinión, aquellas largas reuniones con los
pilotos resultaban tediosas para algunos. Sin embargo, tenían el valor de
ser un auténtico colegio formador de pilotos. Por algo de esa generación
hoy tenemos exponentes en las categorías nacionales como Markel,
Londero, Bastidas, Martínez, Reutemann, Ghirardi, etc.
"Mirá Ale, hay algo que quiero que entiendas. Cuando largan 36 los
últimos venimos en quinta a fondo, no hay demasiado tiempo para
esquivar a nadie que se haya quedado parado. Además la curva 1 es muy
cerrada, una curva para entrar de a uno. Con suerte, de a dos en la
largada sin que nadie te choque. Si uno llegara a hacer un trompo por
ejemplo, la posibilidad de evitar la colisión es prácticamente nula"
Esta última y muy interesante opinión es la de un piloto de la "C" en
actividad, o sea que es opinión de primera mano. Creemos entonces que
estamos muy cerca de llegar a un consenso.
Conclusión final y propuesta del editor de esta humilde Hoja
Tal como decía el padre de uno de los pilotos de la Junior "A" no se
trató de un hecho aislado sino de una desafortunada cadena de errores.
Con todos estos detalles analizados podemos preguntarnos ¿En qué
estamos fallando? ¿Qué nos falta?
Sostenemos que a pesar de este desgraciado suceso, a pesar de la división
del parque en dos finales, bien que se podría tener el mismo accidente en
cualquier momento y en cualquier circuito. Largar menos karts reduce en
un 50 % las probabilidades de incidente, pero no el 100 %.
Lo que debería hacerse, tanto en grillas de 36 como en las de 23 karts. es
(por si no se entendió el segundo párrafo de esta nota) ampliar en número
de auxiliares de pista en cada largada, de manera que sean varias las
banderas de alerta y no todo dependa de un largador que como todo ser
humano, se puede equivocar.
Los propios padres de los pilotos del otro lado del guard rail pudieron
haber desempeñado esta tarea en Concepción, aunque lo ideal sería que
lo haga un profesional. Los veedores de las dos últimas curvas, por
ejemplo, podrían dejar de ser cómodos espectadores de la largada y
situarse mucho más cerca. Luego, empleando por ejemplo una bici de
cross corren a tomar su posición de trabajo. Con un poco de práctica,
en un circuito de 1 minuto como aquel, sería perfectamente posible.
Pueden haber ideas mejores, por supuesto. Pero debería ser formuladas
en una reunión anterior a las finales. De dejar todo así como está, si
la culpa la tuvo un único "chivo expiatorio"... vayamos conversando
desde ahora mismo, quién pagará los "platos rotos" porque de aquel
inolvidable (por lo estúpido) "caso Beltrame", del costoso juicio
perdido se tuvo que haber aprendido algo.
¿No es cierto?
Alejandro Daniel Spizzirri (texto y fotos)
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