Se le ganó a la lluvia, no hubo incidentes polémicos, se incrementó el
público que asistió a esta tercera fecha y no se rompió más que una
máquina, que ya había largado "remendada" en realidad. Este fue el
saldo de la tercera final del año del Turismo Pista 1400, que dominó
desde la entrada al primer giro hasta la bandera a cuadros el actual
campeón Walter Giovenale (Fiat Duna).
Giovenale entrando al último giro. La foto lo dice todo. por la última curva iba su escolta, y al cuarto Francois se lo divisa con algún esfuerzo por la
recta opuesta todavía.
Tres retornos contra dos ausencias -una obligada, visto el estado en que
quedó el Fiat Uno de "Calo" Garnier en la primera fecha- no lograron
compensar esa sensación de que la categoría está para más, pero sigue
sin lograr reunir un parque decoroso.
Las ausencias de pilotos como David Lound, Ignacio Rodríguez, Martín
Chiraulo y Javier Gómez se notan, y mucho. Así las cosas, el 1-2-3 del
Pierini Competición luce como lógico premio por la dedicación que
pone este equipo, quedando por definir en pista la posición que ocupará
cada uno de ellos.
Siendo más finos en el análisis, el Palio de Gustavo Francois está cada
vez más cerca de presentarles batalla. En los primeros giros pareció que
se iba a meter como cuña entre ellos, mas con el correr de las vueltas
prevaleció el mejor ritmo de Dubois y Huerta.
LAS SERIES: UNA PARA EL CANDIDATO, OTRA PARA ALE PELLEGRINI.
El sábado habíanse disputado las series. Curiosa decisión la de hacer dos con
tan solo doce máquinas, cada categoría tiene su propio reglamento pero por
lógica creemos que con menos de 14 autos debería ser una sola. No va a fal-
tar quien nos recuerde que lo del mínimo de siete rige solamente para la final.
El hasta entonces imbatible en las pruebas libres y en clasificación, Gastón
Dubois, largaba adelante con el Chevrolet Celta en la primera, producto de
su mejor registro sabatino, 1' 28" 570 que dejó a Alejandro Pellegrini a 416,
Walter Giovenale a 540 y Renzo D'Acosta a 822. El quinto, Javier Huerta,
ya estaba a 1" 215.
Lo anticipó Giovenale en el primer giro, en tanto a Dubois le costó bastan-
te conservar el segundo lugar ante el irreverente Huerta (no hay pero cuña
que la del mismo palo).
Pero no por mucho tiempo. En la segunda pasada, estaba segundo Huerta y
tercero Dubois, siempre con Walter adelante pero sin lograr escaparse. Tres
giros frenéticos fueron, porque en la tercera, el de Colonia Mabragaña se
puso adelante, seguido por Giovenale. Huerta había caído a la cuarta coloca-
ción, detrás de Fernando Roude, que siempre se mantuvo al acecho.
La "normalidad" regresó en el cuarto giro. Huerta recuperó el tercer lugar,
en el giro que Dubois comenzó a distanciarse. Para el quinto, se habían
separado entre sí, formando dos dúos. Uno Dubois- Giovenale, el otro
Huerta- Roude. No tan lejos de ellos seguía girando Scervino, en su retorno
tras ausentarse en las dos primeras del año.
En el último intento, Walter ensayó tirarse por adentro. Frenó con lo justo,
no pudiendo evitar doblar un poco fuera de radio. Por adentro, en la última
curva se le coló Dubois recuperando la punta. Llegaron a la par, pero con
claridad, Gastón se impuso por algo así como una trompa.
"De todo. Me pasó de todo" nos dijo Ricky Brugada tras la final. Aquí lo vemos trabajando para cambiar de caja,
la que vemos en la extrema izauierda (prestada por Walter Barbieri) y el mismo piloto metiendo mano. No
siempre el esfuerzo tiene premio. ¡A pensar en la próxima!
La segunda serie no tuvo esos ribetes emotivos. En parte, porque Ale
Pellegrini estuvo contundente, logrando una pequeña pero indescontable
ventaja en los dos primeros giros sobre Gustavo "el Presi" Francois.
Al Fiat Palio azul lo seguían Prelat, D'Acosta, Peliquero y Brugada. En la
tercera ronda, con Pellegrini ya cortado, el sanducero había dejado atrás
a Prelat e intentaba incomodar a Francois. Por su parte "El Rayo" Prelat
se las veía con Daniel Peliquero, que reapareció con una pequeña ayuda
de los amigos de siempre. En especial de Fabián Vinzon. En este tercer
giro pareció prevalecer Peliquero, pero dobló muy abierto la última curva
por lo que Prelat por adentro reconquistó el cuarto lugar.
Le duró un giro. En el cuarto se retrasó, por lo que la efímera batalla tuvo
un ganador anticipado. Ricky Brugada se mantenía en pista, ese fue su
mayor mérito en un fin de semana que no le resultaría favorable.
Los dos últimos giros fueron muy aburridos. Francois le hizo diferencia a
su compañero de equipo D'Acosta, los dos detrás del sólido (y solitario)
líder. Ale Pellegrini se postuló para ser el tercero en discordia al día
siguiente.
LA FINAL: UN POCO DE GIOVENALE FUE MUCHO PARA EL RESTO.
El horario de la mañana del domingo se estiró como un chicle, porque la
gente del karting AKAC pidió dos tandas de prácticas antes de clasificar,
como ya es tradición en cualquier parte de Entre Ríos. Más tarde, se respetó
el cronograma, logrando que para las 16 toda la actividad (inclusive los
podios) esté terminada. Un lindo ensayo para junio, cuando quizás haya que
adelantar todo un poco más, o suspender y reanudar la actividad con motivo
del Mundial de fútbol. ¿Porqué no? Ya lo hemos vivido en otras ocasiones,
aunque el recuerdo no es muy bueno que digamos.
La retrasada prueba libre matutina dejó como saldo muchas cosas para reto-
car. La caja rota de Ricardo Brugada (foto 2) el soporte del amortiguador
delantero que se le desprendió al Duna de Peliquero, ajustes de carburadores
a la orden del día, menos los que no requirieron más que un repaso a lo ya
hecho, como Pellegrini que decidió no salir. El clima seguía en un "que si,
que no"... "No, no creo que llueva" opinó Javier Huerta ante nuestra duda.
Un solo equipo tenía a la vista gomas para piso mojado, el FW de Barbieri.
Pero el mediodía llegó, con nubes cada minuto más oscuras, pero que de
ninguna manera anunciaban las gotas que caerían más tarde. Pellegrini y
Dubois en primera línea. Para hacer honor a la verdad, los cuatro integran-
tes del Pierini Competición entre los seis primeros de la grilla, con dos de
los tres de FW Motorsports metidos entre medio. ¿Serían oposición?
Como vemos en el "collage" (foto 4) Pellegrini supo aprovechar el cajón 1
de la grilla, apareciendo en punta para cerrar el primer paso por la línea.
Giovenale le había birlado el segundo lugar a Dubois, y más atrás Peliquero
se había anticipado a D'Acosta.
Una imagen que se está haciendo repetida (tres de las últimas cuatro carreras) Walter Giovenale saluda a
su mujer y su beba, apenas bajado del Duna. A la derecha, Fernando Pierini respeta el mágico instante.
El orden del compacto pelotón de punta era: Pellegrini, Giovenale, Dubois,
Francois, Peliquero, D'Acosta, Huerta y Roude. Con algunso metros perdidos,
Scervino era acosado por Brugada. Cerraba Prelat, increíblemente detrás de
Caceres.
Para el segundo giro, con todos muy juntos todavía, Brugada había podido con
el reaparecido Francisco Scervino, colocándose noveno. Las ilusiones de Ale
Pellegrini querían tomar forma en la tercera ronda, cuando había logrado una
pequeña, apenas perceptible luz sobre el resto, pero no de su compañero
Giovenale, que lo "acompañó" en su intento de fuga.
Más interesante estaba el pelotón que encabezaba Huerta, con Peliquero acosado
por Roude, que había dejado atrás a D'Acosta, como lo había hecho Javier en el
giro anterior. Dicho de otra forma, "se venía pa' trás el Duna amarillo".
Y para alegría del público, presente como en los viejos tiempos a pesar de lo
que se denominó "súper domingo" por la gran oferta que la TV ofreció en
materia de deporte motor, también en la cola se había formado un trío: Brugada-
Scervino- Caceres, a los que se iba acercando Prelat.
Primer golpe de escena. En la cuarta vuelta apareció adelante Giovenale. El
Fiat Palio de Francois giraba escolta ¡ésa si que era sorpresa! Pellegrini se las
veía negras tratando que Dubois no lo supere. El ex campeón de karting enten-
dió que era hora de poner toda la carne en el asador, con Walter en punta.
En el pelotón de persecución Huerta se había distanciado del resto (claramente
iba en busca de descontarle a los de la punta) Peliquero, Roude y D'Acosta
seguían en al suya. Sería el sanducero el que sacaría mejor provecho, como
veremos.
Esta quinta vuelta definió a favor de Giovenale la final, se distanció. Francois
no podía descontar. Dubois estaba lejos, pese a haber dado cuenta de Pellegrini.
Para dar una idea, había media recta opuesta a favor de Giovenale, y otro tanto
entre Francois y Dubois. En la hilera no había pasado Brugada, que apareció
segundos más tarde, a marcha lenta enfilando para la calle de boxes. La tercera
fecha era un recuerdo para él. De los malos.
El tren de marcha que le había imprimido Dubois al Celta era magnífico, aunque
ni así se explica como en uno solo giro alcanzó a Francois, e impecable maniobra
mediante, se hizo del segundo lugar. La diferencia con respecto al líder se
había ampliado otro poco. Y las máquinas estaban muy parejas.
Las novedades no se detenían ahí. Entre los colistas, el retraso de Caceres le
permitió a Prelat descontarle esa brecha que le estaba costando más de los
previsto al "Rayo" del barrio San Martín.
Arriba: Pellegrini liderando en la primera vuelta. Terminó discutiendo agriamente con el Comisario Dep.
por la maniobra que lo dejó fuera de carrera. Abajo, Javier Huerta abraza a un colaborador. Completó el
1-2-3 del equipo del barrio Juan XXIII. Derecha, el sanducero Renzo D'Acosta, cada vez más cerca del
lote de punta. Finalizó detrás del Fiat Palio azul de Francois.
Gustavo Francois había hecho una gran vuelta a la cola del Celta, pero no
hubo desquite porque Dubois cuidó bien la cuerda. Impotente espectador de
esta contienda era Pellegrini, que intentaba no perderles pisada, por si se
producía algún toque.
Cuando le tocó pasar al segundo lote, Peliquero dibujó un semitrompo en la
última curva. Se le detuvo el motor. Allí terminó el poco productivo domingo
del "Gringo", el ex subcampeón de la categoría. La camioneta de R. Arrijuría
lo remolcaría con premura a un lugar más seguro.
¿Qué habrá pasado en esa misteriosa octava vuelta? Detrás del solitario líder,
pasó Francois, pero no Dubois. El tercero era Pellegrini, con Huerta cada vez
más cerca de ellos. Recién quinto Dubois, que precedía a D'Acosta, Scervino,
Prelat y Caceres. Cerraba Fernando Roude, otra vez retrasado.
De modo que, cumplidas nueve vueltas, la conclusión era básica. Francois
estaba demasiado lejos, no habría hazaña esta vez. El ritmo de Giovenale no
decayó, pero evidentemente era más tranquilo.
Gastón atacaba con desesperación a Huerta, y entre los más distanciados,
Prelat se ponía delante de Scervino. Por supuesto que hasta ahí iba a llegar
la remontada del "veterinario volador" porque D'Acosta estaba muy lejos de
su alcance.
Caceres no estaba tan lejos de Scervino, y Roude obligado a recuperar terreno.
Ya habían ganado una posición, porque en esta vuelta Pellegrini no había pasa-
do (despiste "ayudado" en la curva 1).
O Giovenale estuvo demasiado tranquilo en la undécima, o cometió un peque-
ño error, porque Francois descontó algún segundo, o dos. Estaba más cerca,
haciendo crecer la esperanza de un final imprevisto. Fue cayendo el interés de
los espectadores a medida que transcurría la final, y este detalle los "despertó".
Cual eslabón perdido, Renzo D'Acosta apuraba el paso, sin dejar de ser el
solitario nexo entre los dos bien definidos grupos de autos en que se dividió
el parque del TP 1400 en esta final.
Seguía la pelea por el podio entre Huerta y Dubois, al que le costó mucho
quebrar la resistencia del concordiense. A Walter, está claro que le avisaron
por radio, porque puso (gran) distancia nuevamente entre su Duna y el Palio.
Era demasiado, algo así como un golpe de nocaut.
Recién en la decimotercera Gastón recuperó el tercer lugar, a expensas de
Huerta. Seguían así: D'Acosta, Prelat, Scervino, Caceres y Roude, que le
había llegado al Fiat cuatricolor número 13.
Otro craso error de apreciación cometeríamos en la decimocuarta ronda.
"No pasa nada adelante"... todo parecía definido, a falta de tres vueltas y
fracción. Se alteró el orden únicamente entre los colistas. Roude dejó
noveno a Caceres.
Pero no. Francois no estaba perdiendo ritmo -según nos manifestaría
minutos más tarde- era Dubois el que se venía como los bomberos,
marcando en el interín el RV.
También D'Acosta se les iba acercando, aunque la labor del uruguayo
-siempre de menor a mayor- no era tan perceptible. Además, se hizo
presente el protagonista que faltaba: la lluvia.
No se podría llamarle lluvia, en rigor, a esas gotas aisladas que nos
llevaron a pergeñar la frase "llueve como en el TP 1400" hace unos
años atrás. Pero en cierto modo cambiaron los planes de más de uno...
¡menos los de Dubois y Roude!
Así fue como Fernando y su recuperado Fiat Uno lograron dejar atrás a
Scervino en la vuelta 15, y una más tarde a Prelat. Por su parte, Gastón
estuvo implacable con Francois, logrando con lo justo el segundo lugar,
un gran negocio porque lo mantiene en la cima de la tabla, con 13
puntos de diferencia sobre el nuevo escolta, Gustavo Francois. Pero no
tan tranquilo como parece. El verdadero rival es Walter, que sigue
subiendo en la tabla. Se ubica en una expectante cuarta colocación, a
18.5
No hay descanso para Giovenale. Ni para Facundo, Fernando y Nicolás
Pierini (y el resto del equipo) porque alistan el Fiat Uno para retornar al
Turismo Pista de la APTP este fin de semana, en el mismo escenario.
Reaparición del esforzado Alejandro Caceres. Arriba el Fiat Uno, y abajo el piloto, dialogando post final con
Mario Aramburo. A la derecha, el trompo que marginó a Daniel Peliquero.
CLASIFICADOR FINAL- TERCERA FECHA- TURISMO PISTA 1400
Parque Autodromo Ciudad de Concordia- Circuito de 3.080 metros
18 vueltas - Distancia 55, 440 km 29 de abril de 2018
1º Walter Giovenale Fiat Duna 27' 14" 463
2º Gastón Dubois Chevrolet Celta a 4" 959
3º Javier Huerta Fiat Uno a 7" 817
4º Gustavo Francois Fiat Palio a 13" 022
5º Renzo D'Acosta Fiat Uno a 17" 245
6º Héctor Prelat Fiat Uno a 29" 530
7º Fernando Roude Fiat Uno a 35" 481
8º Francisco Scervino Fiat Uno a 41" 623
9º Alejandro Caceres Fiat Uno a una vuelta
Abandonaron:
Alejandro Pellegrini Fiat Uno 9 giros cumplidos
Daniel Peliquero Fiat Duna 7 giros
Ricardo Brugada Fiat Uno 6 giros
Principales posiciones del Campeonato 2018:
Dubois 78, Francois 65, D'Acosta 60, Giovenale 59.5, Pellegrini 50,
Huerta 44, Prelat 41, Orellana 27, Roude 22, Scervino 17, Caceres
16, Garnier, Ruhl y Peliquero 5.
@AleSpizirri (texto y fotos)
público que asistió a esta tercera fecha y no se rompió más que una
máquina, que ya había largado "remendada" en realidad. Este fue el
saldo de la tercera final del año del Turismo Pista 1400, que dominó
desde la entrada al primer giro hasta la bandera a cuadros el actual
campeón Walter Giovenale (Fiat Duna).
Giovenale entrando al último giro. La foto lo dice todo. por la última curva iba su escolta, y al cuarto Francois se lo divisa con algún esfuerzo por la
recta opuesta todavía.
Tres retornos contra dos ausencias -una obligada, visto el estado en que
quedó el Fiat Uno de "Calo" Garnier en la primera fecha- no lograron
compensar esa sensación de que la categoría está para más, pero sigue
sin lograr reunir un parque decoroso.
Las ausencias de pilotos como David Lound, Ignacio Rodríguez, Martín
Chiraulo y Javier Gómez se notan, y mucho. Así las cosas, el 1-2-3 del
Pierini Competición luce como lógico premio por la dedicación que
pone este equipo, quedando por definir en pista la posición que ocupará
cada uno de ellos.
Siendo más finos en el análisis, el Palio de Gustavo Francois está cada
vez más cerca de presentarles batalla. En los primeros giros pareció que
se iba a meter como cuña entre ellos, mas con el correr de las vueltas
prevaleció el mejor ritmo de Dubois y Huerta.
LAS SERIES: UNA PARA EL CANDIDATO, OTRA PARA ALE PELLEGRINI.
El sábado habíanse disputado las series. Curiosa decisión la de hacer dos con
tan solo doce máquinas, cada categoría tiene su propio reglamento pero por
lógica creemos que con menos de 14 autos debería ser una sola. No va a fal-
tar quien nos recuerde que lo del mínimo de siete rige solamente para la final.
El hasta entonces imbatible en las pruebas libres y en clasificación, Gastón
Dubois, largaba adelante con el Chevrolet Celta en la primera, producto de
su mejor registro sabatino, 1' 28" 570 que dejó a Alejandro Pellegrini a 416,
Walter Giovenale a 540 y Renzo D'Acosta a 822. El quinto, Javier Huerta,
ya estaba a 1" 215.
Lo anticipó Giovenale en el primer giro, en tanto a Dubois le costó bastan-
te conservar el segundo lugar ante el irreverente Huerta (no hay pero cuña
que la del mismo palo).
Pero no por mucho tiempo. En la segunda pasada, estaba segundo Huerta y
tercero Dubois, siempre con Walter adelante pero sin lograr escaparse. Tres
giros frenéticos fueron, porque en la tercera, el de Colonia Mabragaña se
puso adelante, seguido por Giovenale. Huerta había caído a la cuarta coloca-
ción, detrás de Fernando Roude, que siempre se mantuvo al acecho.
La "normalidad" regresó en el cuarto giro. Huerta recuperó el tercer lugar,
en el giro que Dubois comenzó a distanciarse. Para el quinto, se habían
separado entre sí, formando dos dúos. Uno Dubois- Giovenale, el otro
Huerta- Roude. No tan lejos de ellos seguía girando Scervino, en su retorno
tras ausentarse en las dos primeras del año.
En el último intento, Walter ensayó tirarse por adentro. Frenó con lo justo,
no pudiendo evitar doblar un poco fuera de radio. Por adentro, en la última
curva se le coló Dubois recuperando la punta. Llegaron a la par, pero con
claridad, Gastón se impuso por algo así como una trompa.
"De todo. Me pasó de todo" nos dijo Ricky Brugada tras la final. Aquí lo vemos trabajando para cambiar de caja,
la que vemos en la extrema izauierda (prestada por Walter Barbieri) y el mismo piloto metiendo mano. No
siempre el esfuerzo tiene premio. ¡A pensar en la próxima!
La segunda serie no tuvo esos ribetes emotivos. En parte, porque Ale
Pellegrini estuvo contundente, logrando una pequeña pero indescontable
ventaja en los dos primeros giros sobre Gustavo "el Presi" Francois.
Al Fiat Palio azul lo seguían Prelat, D'Acosta, Peliquero y Brugada. En la
tercera ronda, con Pellegrini ya cortado, el sanducero había dejado atrás
a Prelat e intentaba incomodar a Francois. Por su parte "El Rayo" Prelat
se las veía con Daniel Peliquero, que reapareció con una pequeña ayuda
de los amigos de siempre. En especial de Fabián Vinzon. En este tercer
giro pareció prevalecer Peliquero, pero dobló muy abierto la última curva
por lo que Prelat por adentro reconquistó el cuarto lugar.
Le duró un giro. En el cuarto se retrasó, por lo que la efímera batalla tuvo
un ganador anticipado. Ricky Brugada se mantenía en pista, ese fue su
mayor mérito en un fin de semana que no le resultaría favorable.
Los dos últimos giros fueron muy aburridos. Francois le hizo diferencia a
su compañero de equipo D'Acosta, los dos detrás del sólido (y solitario)
líder. Ale Pellegrini se postuló para ser el tercero en discordia al día
siguiente.
LA FINAL: UN POCO DE GIOVENALE FUE MUCHO PARA EL RESTO.
El horario de la mañana del domingo se estiró como un chicle, porque la
gente del karting AKAC pidió dos tandas de prácticas antes de clasificar,
como ya es tradición en cualquier parte de Entre Ríos. Más tarde, se respetó
el cronograma, logrando que para las 16 toda la actividad (inclusive los
podios) esté terminada. Un lindo ensayo para junio, cuando quizás haya que
adelantar todo un poco más, o suspender y reanudar la actividad con motivo
del Mundial de fútbol. ¿Porqué no? Ya lo hemos vivido en otras ocasiones,
aunque el recuerdo no es muy bueno que digamos.
La retrasada prueba libre matutina dejó como saldo muchas cosas para reto-
car. La caja rota de Ricardo Brugada (foto 2) el soporte del amortiguador
delantero que se le desprendió al Duna de Peliquero, ajustes de carburadores
a la orden del día, menos los que no requirieron más que un repaso a lo ya
hecho, como Pellegrini que decidió no salir. El clima seguía en un "que si,
que no"... "No, no creo que llueva" opinó Javier Huerta ante nuestra duda.
Un solo equipo tenía a la vista gomas para piso mojado, el FW de Barbieri.
Pero el mediodía llegó, con nubes cada minuto más oscuras, pero que de
ninguna manera anunciaban las gotas que caerían más tarde. Pellegrini y
Dubois en primera línea. Para hacer honor a la verdad, los cuatro integran-
tes del Pierini Competición entre los seis primeros de la grilla, con dos de
los tres de FW Motorsports metidos entre medio. ¿Serían oposición?
Como vemos en el "collage" (foto 4) Pellegrini supo aprovechar el cajón 1
de la grilla, apareciendo en punta para cerrar el primer paso por la línea.
Giovenale le había birlado el segundo lugar a Dubois, y más atrás Peliquero
se había anticipado a D'Acosta.
Una imagen que se está haciendo repetida (tres de las últimas cuatro carreras) Walter Giovenale saluda a
su mujer y su beba, apenas bajado del Duna. A la derecha, Fernando Pierini respeta el mágico instante.
El orden del compacto pelotón de punta era: Pellegrini, Giovenale, Dubois,
Francois, Peliquero, D'Acosta, Huerta y Roude. Con algunso metros perdidos,
Scervino era acosado por Brugada. Cerraba Prelat, increíblemente detrás de
Caceres.
Para el segundo giro, con todos muy juntos todavía, Brugada había podido con
el reaparecido Francisco Scervino, colocándose noveno. Las ilusiones de Ale
Pellegrini querían tomar forma en la tercera ronda, cuando había logrado una
pequeña, apenas perceptible luz sobre el resto, pero no de su compañero
Giovenale, que lo "acompañó" en su intento de fuga.
Más interesante estaba el pelotón que encabezaba Huerta, con Peliquero acosado
por Roude, que había dejado atrás a D'Acosta, como lo había hecho Javier en el
giro anterior. Dicho de otra forma, "se venía pa' trás el Duna amarillo".
Y para alegría del público, presente como en los viejos tiempos a pesar de lo
que se denominó "súper domingo" por la gran oferta que la TV ofreció en
materia de deporte motor, también en la cola se había formado un trío: Brugada-
Scervino- Caceres, a los que se iba acercando Prelat.
Primer golpe de escena. En la cuarta vuelta apareció adelante Giovenale. El
Fiat Palio de Francois giraba escolta ¡ésa si que era sorpresa! Pellegrini se las
veía negras tratando que Dubois no lo supere. El ex campeón de karting enten-
dió que era hora de poner toda la carne en el asador, con Walter en punta.
En el pelotón de persecución Huerta se había distanciado del resto (claramente
iba en busca de descontarle a los de la punta) Peliquero, Roude y D'Acosta
seguían en al suya. Sería el sanducero el que sacaría mejor provecho, como
veremos.
Esta quinta vuelta definió a favor de Giovenale la final, se distanció. Francois
no podía descontar. Dubois estaba lejos, pese a haber dado cuenta de Pellegrini.
Para dar una idea, había media recta opuesta a favor de Giovenale, y otro tanto
entre Francois y Dubois. En la hilera no había pasado Brugada, que apareció
segundos más tarde, a marcha lenta enfilando para la calle de boxes. La tercera
fecha era un recuerdo para él. De los malos.
El tren de marcha que le había imprimido Dubois al Celta era magnífico, aunque
ni así se explica como en uno solo giro alcanzó a Francois, e impecable maniobra
mediante, se hizo del segundo lugar. La diferencia con respecto al líder se
había ampliado otro poco. Y las máquinas estaban muy parejas.
Las novedades no se detenían ahí. Entre los colistas, el retraso de Caceres le
permitió a Prelat descontarle esa brecha que le estaba costando más de los
previsto al "Rayo" del barrio San Martín.
Arriba: Pellegrini liderando en la primera vuelta. Terminó discutiendo agriamente con el Comisario Dep.
por la maniobra que lo dejó fuera de carrera. Abajo, Javier Huerta abraza a un colaborador. Completó el
1-2-3 del equipo del barrio Juan XXIII. Derecha, el sanducero Renzo D'Acosta, cada vez más cerca del
lote de punta. Finalizó detrás del Fiat Palio azul de Francois.
Gustavo Francois había hecho una gran vuelta a la cola del Celta, pero no
hubo desquite porque Dubois cuidó bien la cuerda. Impotente espectador de
esta contienda era Pellegrini, que intentaba no perderles pisada, por si se
producía algún toque.
Cuando le tocó pasar al segundo lote, Peliquero dibujó un semitrompo en la
última curva. Se le detuvo el motor. Allí terminó el poco productivo domingo
del "Gringo", el ex subcampeón de la categoría. La camioneta de R. Arrijuría
lo remolcaría con premura a un lugar más seguro.
¿Qué habrá pasado en esa misteriosa octava vuelta? Detrás del solitario líder,
pasó Francois, pero no Dubois. El tercero era Pellegrini, con Huerta cada vez
más cerca de ellos. Recién quinto Dubois, que precedía a D'Acosta, Scervino,
Prelat y Caceres. Cerraba Fernando Roude, otra vez retrasado.
De modo que, cumplidas nueve vueltas, la conclusión era básica. Francois
estaba demasiado lejos, no habría hazaña esta vez. El ritmo de Giovenale no
decayó, pero evidentemente era más tranquilo.
Gastón atacaba con desesperación a Huerta, y entre los más distanciados,
Prelat se ponía delante de Scervino. Por supuesto que hasta ahí iba a llegar
la remontada del "veterinario volador" porque D'Acosta estaba muy lejos de
su alcance.
Caceres no estaba tan lejos de Scervino, y Roude obligado a recuperar terreno.
Ya habían ganado una posición, porque en esta vuelta Pellegrini no había pasa-
do (despiste "ayudado" en la curva 1).
O Giovenale estuvo demasiado tranquilo en la undécima, o cometió un peque-
ño error, porque Francois descontó algún segundo, o dos. Estaba más cerca,
haciendo crecer la esperanza de un final imprevisto. Fue cayendo el interés de
los espectadores a medida que transcurría la final, y este detalle los "despertó".
Cual eslabón perdido, Renzo D'Acosta apuraba el paso, sin dejar de ser el
solitario nexo entre los dos bien definidos grupos de autos en que se dividió
el parque del TP 1400 en esta final.
Seguía la pelea por el podio entre Huerta y Dubois, al que le costó mucho
quebrar la resistencia del concordiense. A Walter, está claro que le avisaron
por radio, porque puso (gran) distancia nuevamente entre su Duna y el Palio.
Era demasiado, algo así como un golpe de nocaut.
Recién en la decimotercera Gastón recuperó el tercer lugar, a expensas de
Huerta. Seguían así: D'Acosta, Prelat, Scervino, Caceres y Roude, que le
había llegado al Fiat cuatricolor número 13.
Otro craso error de apreciación cometeríamos en la decimocuarta ronda.
"No pasa nada adelante"... todo parecía definido, a falta de tres vueltas y
fracción. Se alteró el orden únicamente entre los colistas. Roude dejó
noveno a Caceres.
Pero no. Francois no estaba perdiendo ritmo -según nos manifestaría
minutos más tarde- era Dubois el que se venía como los bomberos,
marcando en el interín el RV.
También D'Acosta se les iba acercando, aunque la labor del uruguayo
-siempre de menor a mayor- no era tan perceptible. Además, se hizo
presente el protagonista que faltaba: la lluvia.
No se podría llamarle lluvia, en rigor, a esas gotas aisladas que nos
llevaron a pergeñar la frase "llueve como en el TP 1400" hace unos
años atrás. Pero en cierto modo cambiaron los planes de más de uno...
¡menos los de Dubois y Roude!
Así fue como Fernando y su recuperado Fiat Uno lograron dejar atrás a
Scervino en la vuelta 15, y una más tarde a Prelat. Por su parte, Gastón
estuvo implacable con Francois, logrando con lo justo el segundo lugar,
un gran negocio porque lo mantiene en la cima de la tabla, con 13
puntos de diferencia sobre el nuevo escolta, Gustavo Francois. Pero no
tan tranquilo como parece. El verdadero rival es Walter, que sigue
subiendo en la tabla. Se ubica en una expectante cuarta colocación, a
18.5
No hay descanso para Giovenale. Ni para Facundo, Fernando y Nicolás
Pierini (y el resto del equipo) porque alistan el Fiat Uno para retornar al
Turismo Pista de la APTP este fin de semana, en el mismo escenario.
Reaparición del esforzado Alejandro Caceres. Arriba el Fiat Uno, y abajo el piloto, dialogando post final con
Mario Aramburo. A la derecha, el trompo que marginó a Daniel Peliquero.
CLASIFICADOR FINAL- TERCERA FECHA- TURISMO PISTA 1400
Parque Autodromo Ciudad de Concordia- Circuito de 3.080 metros
18 vueltas - Distancia 55, 440 km 29 de abril de 2018
1º Walter Giovenale Fiat Duna 27' 14" 463
2º Gastón Dubois Chevrolet Celta a 4" 959
3º Javier Huerta Fiat Uno a 7" 817
4º Gustavo Francois Fiat Palio a 13" 022
5º Renzo D'Acosta Fiat Uno a 17" 245
6º Héctor Prelat Fiat Uno a 29" 530
7º Fernando Roude Fiat Uno a 35" 481
8º Francisco Scervino Fiat Uno a 41" 623
9º Alejandro Caceres Fiat Uno a una vuelta
Abandonaron:
Alejandro Pellegrini Fiat Uno 9 giros cumplidos
Daniel Peliquero Fiat Duna 7 giros
Ricardo Brugada Fiat Uno 6 giros
Principales posiciones del Campeonato 2018:
Dubois 78, Francois 65, D'Acosta 60, Giovenale 59.5, Pellegrini 50,
Huerta 44, Prelat 41, Orellana 27, Roude 22, Scervino 17, Caceres
16, Garnier, Ruhl y Peliquero 5.
@AleSpizirri (texto y fotos)
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