viernes, 26 de mayo de 2023

F.R.E: En busca de la paridad perdida

        Formando parte del tercer evento del año de las provinciales

de A.P.E.R. se presentó en Paraná la Fórmula Renault Entrerriana,

con algunas novedades, aumentando el parque a 14 monopostos

doa más que en la anterior. Lo que no varió es el resultado, pues

el campeón Lucas Trossero volvió a dominar la Semifinal (serie) y

la Final dominical, con una máquina que hoy por hoy es muy 

superior al resto.





Las dos tandas de entrenamientos fueron un espejismo. En la

primera Trossero estuvo adelante por  solo 427 milésimas (el

segundo fue Peruchena) y en la segunda tanda le sacó otro 

poquito a Ayrton Mogni, 446. Peruchena quedó a 663 lo que creó

una falsa sensación de paridad, que ya no volvería a aparecer

en todo el fin de semana. Lo rescatable de esta segunda salida 

de entrenamientos sabatina, fue que el tiempo de Trossero cayó 

en más de un segundo entre tanda y tanda. Y además, el cielo

fue el protagonista menos pensado del sábado, porque la pista

no estuvo mojada para las primeras dos prácticas, pero

casualmente las condiciones empeorarían en el momento menos 

oportuno.


Ése fue cuando llegó el llamado de clasificar. La supremacía de

Trossero quedó plasmada en el mejor crono, un registro que lo 

dejó a 4,674 del segundo Ayrton Mayer. La lucha se iba a dar el

segundo puesto para atrás, con Hernán Paredes como nexo antes

de Leon, Wertz, Lozano y Peruchena que giraron en tiempos 

similares. 


Todas estas especulaciones previas sin embargo no tenían en 

cuenta un dato, la mala clasifiación de Ayrton Mogni. Al joven

exkartista de Urdinarrain nunca hay que descartarlo y menos en

Paraná donde ya había demostrado andar muy bien. Hay que

citar además, que Miguel Franzoi recién estuvo en condiciones

de salir a pista al día siguiente, el domingo.


Domingo 21 de mayo, todo de Trossero.


La mañana fue  lluviosa, luego la pista se fue secando pero no lo

suficiente cuando le tocó a la Fórmula Renault Entrerriana salir

a escena. La semifinal se disputó con ese piso húmedo que al

campeón Trossero le venía tan bien, como quedó demostrado

el día anterior. Fue victoria de semáforo a bandera.


La sorpresa la dio Tomás Wertz metiéndose a la cabeza del

pelotón que acaparó las miradas, haciendo todo prolijo y no 

imitando a las cortadoras de césped como sus rivales directos,

en especial en la curva 2 (el retome). El venerable chasis

fabricado en aquel tiempo hermoso cuando a escuadra y chapa

de aluminio remachado se hacían cosas prodigiosas (y que

luego funcionaron, detalle no menor) que pasara por muchas

manos, entre ellas la del propio Trossero, ahora pintado de

azul o violeta como todos los de la familia Wertz, se

mantuvo en esa posición hasta que Mayer se recuperó,

sucumbiendo también al final ante el "rayo" negro y

amarillo de Franzoi, que no pasaría la técnica.


La cuarta colocación también fue objetivo de muchos. Fueron

cinco los que pasaron por ellas, finalmente la bandera a cuadros 

cayó sobre el sanjosecino León pero como tampoco pasó la 

técnica, dicho lugar recayó en Ayrton Mogni, uno de los que

esporádicamente supieron estar en esa colcación en plena

batalla. En fin, atrás se dio toda esa pelea que no se vio

adelante porque Trossero hizo su carrera, más de dos segundos 

más rapido (promedio) por vuelta que el resto,pues le sacó más

de 20 segundos a Mayer. Lo que se dice, contundente.


Tímidos rayos de sol se empezaron a colar entre las nubes, a la

medida que se acercaba el mediodía. La final fue con otro tiempo.

El gris dominante de la jornada anterior le fue dando paso a una

esplendorosa tarde, por momentos un poco ventosa. Sin que

el sol alcance con su cobertura a todo el predio del CVE se

largó la tercera del año, con el flamante Crespi de Maximiliano 

Lozano en el primer cajón de la grilla.


Quedó quinto en los primeros metros, ganando dos colocaciones

Trossero, como si no tuviese ningún apuro en ir superando a los

rivales. Al término de la primera vuelta, ya estaba segundo detrás

de Valerio Peruchena, líder tras una primera vuelta digna de los

archivos de Ripley.


Sucedió así. Una vez largada la prueba, Peruchena se tiró por afuera 

en la curva 1 y quedó adelante. Wertz quiso hacer lo  propio por la

peraltada, quedando a la par de Lozano. Llegados a la curva 2,

Valerio bloquea y se pasa, por adentro doblan el retome siempre a

la par, y se impone el de Libertador San Martín. De esta manera,

Tomás Wertz se dio el lujo de puntear tres cuartos de vuelta.


Porque 150 metros más adelante, Peruchena había recuperado (en

"el Chupete") la segunda colocación y el compacto lote de seis 

máquinas bajó por la recta opuesta con Ayrton Mayer ya tercero.

En la "ese" de la mal denominada "chicana" previa a la cortísima

recta que lleva a "la Olla" eran dos grupos de cinco máquinas

cada uno y se pudo apreciar como Peruchena recuperaba la punta

en perfecta frenada, en tanto Trossero se la jugaba por adentro muy

finito, finito, para robarle el segundo lugar a Mayer. Tres posiciones

cedió Wertz y en la recta opuesta Lozano estaba tan retrasado (sexto)

que comandaba el segundo pelotón, también de cinco integrantes.


La acción de esta primera vuelta, analizada así, valió por todas las

restantes vueltas, que en manera decreciente fueron cada una menos

emotivas, pero de ninguna manera aburridas, en especial desde la  

ronda 2 cuando Trossero capturó "su lugar natural" en la bajada de

la recta opuesta, haciendo prevalecer el buen rendimiento de su

motor y la estupenda puesta a punto del chasis que le permite 

frenar con absoluta confianza por adentro con lo justo, lo que

dejó a Peruchena sin posibilidades de responder. En esa tercera

vuelta quedaron entonces, un trío adelante, completado por Mayer.


Se desperdigaron los pelotones, quedando dos tríos (el segundo

encabezado por Wertz) y dos dúos aislados, el primero de ellos

con Lozano al frente. A Wertz lo superó Ayrton Mogni de

inmediato y en el segundo trío, Gabriel García y más tarde Leon 

irían a dar fácil cuenta de Matías Buxman que se dio el lujo de ser

sexto por un par de escasas vueltas, algo así como el eslabón

entre dos grupos, un trío que luego lo fue "fagocitando" sin piedad.

Matías es otro ejemplo de un chasis que va pasando de mano en

mano en esta categoría,  lo importante es que permanecen en ella.


Hay que tener en cuenta la tarea del exkartista de San José. Gian

León largó último (14º) y comenzó a escalar, siendo su remontada

la mejor de la final, imitada en cierta medida por Miguel Franzoi 

que había pasado décimo en la primera vuelta, antes de ser

sorprendido por el jovencito que compitiera en el karting AKAC.


Este meteórico ascenso entonces, nos permitió ver al auto de León

(ahora mejoró la presentación con el agregado de franjas blancas y  

anaranjadas al plateado/negro que ya tenía) en la séptima colocación

cumplidas tres vueltas. Tres vueltas plenas de acción, que marcaron

lamentablemente un antes y un después, ya que Trossero se fue 

escapando adelante y Peruchena, tras comprobar que era imposible

seguirle el ritmo, optó prudentemente por neutralizar la cercanía de

Ayrton Mayer, que por entonces hasta impresionaba mejor que el

chajariense radicado en Paraná.


Mogni cuarto, Wertz quinto. Estos cinco eran apenas los que entraban 

a simple vista en "una sola" recta principal y eso que el campeón apenas

tenía 1,8 segundos de ventaja, todavía no se había escapado mucho.


Otro ejemplo de chasis "perenne" es el de Gabriel García, ex Ayrton 

Mayer cuando éste peleaba el título. Lo vimos pasar con el número

12 tratando de desquitarse de Gianfranco Leon, que en la cuarta

vuelta tenía en la mira a Buxman. Mas atrás del negrito de García 

asomaba Franzoi que fue de menor a mayor, sintiendo claro está su 

flatazo de las prácticas sabatinas.


¿Quién dijo que la Fórmula Renault Entrerriana no tiene innovación ni técnica?
Pronto haremos una o dos notas más en detalle. En este anticipo (la foto es del
2019 en Paraná) vemos como Lucas Trossero aprovechaba al máximo los grises
del reglamento para añadirle aditamientos al ex "wing car". Nos recordó a la
teoría del ing. Pedro Campo que aseguraba que con la baja potencia de los motores,
en la F. Renault el efecto de los mismos sería nulo.



Era la quinta vuelta de carrera, es decir cuatro cumplidas cuando

de los pelotones no quedaban rastros, era solo un "trencito de 

vagones distanciados" el que encabezaba Leon (séptimo) y terminaba

en Lozano (noveno) con todos los de adelante separados entre sí y

el líder Lucas Trossero definitivamente escapado.


No lo advertíamos, pero Mogni había apurado para hasta superar a

Wertz (cuarto). Por la recta principal -nuestra medida visual- solo

cabían cuatro ahora, con el de Udinarrain a punto de pasar por la

casilla que marca la llegada cuando Trossero ya se metía en la

peraltada y en la mitad de la recta, Peruchena controlaba con

suficiencia a Mayer.


Se iba a iniciar la segunda parte de la final, con uno que seguía en

alza (Mogni, que marcaría el RV en la anteúltima tratando de ir

por la hazaña) y la novedad de León sexto, pues en la recta principal

había dado cuenta demasiado fácil de Buxman que iniciaba así una

caída en picada, víctima de una merma de rendimiento. Todo lo

contrario Lozano, que veía agrandarse en los espejos a Franzoi.


Todo esto ocurría cumplidas cinco vueltas, siempre con Wertz 

conservando el quinto lugar pero cada vez más lejos de Mogni.


Dos detalles que resulta imprescindible citar es que Mayer

ya no perseguía a Peruchena, el ritmo decreciente fue bien 

advertido por la gente de Mogni, que alentaba a su "pollo" en

esta simpática "pulseada de Ayrtons" si se nos permite el juego

de palabras. El otro es que Miguel Franzoi ya estaba detrás del

amarillo de Lozano. Todo anunciaba que no iba a poder contenerlo.


Perdía la vuelta Martínez en el inicio de la octava vuelta para el

puntero, mientras detrás en la zona de la "plana" Franzoi 

insistía con Lozano, que había resistido la estocada en el retome.

Ésa era la tremenda distancia entre los autos de punta y los que

peleban por la octava y novena colocación, delante de Buxman.


Hablando de punta, la distancia de Mayer a Mogni se había 

reducido dramáticamente. Precisamente la curva amplia hacia

la izquierda que los pilotos llaman "la plana" (y en realidad

tiene peralte, pero no tanto como la 1) en la vuelta siguiente

Mogni superó por adentro a Mayer, en una maniobra que

mostró el buen andar del "flaco" de Urdinarrain. Iba por más.


Eran casi cuatro segundos de diferencia a favor de Valerio en la

vuelta 8, supuestamente indescontables en las cuatro restantes.

En esta vuelta teníamos una novedad, Franzoi octavo, Lozano

noveno y Buxman décimo, habiendo detenido su caida al fin. Ya

no estaba en pista Gonzalo Zárate (el primero en abandonar, con

el símil Crespi de los viejos) Franco Baroli ahora se le sumaba

a marcha lenta entrando a boxes. Trossero ya había pasado 

completando nueve giros.


Antes de cerrar la décima ronda, Trossero y compañía le iban

sacando la vuelta a Hernán Paredes, tal vez la máquina mejor

presentada del parque. Había dado comienzo la "sesión aparte"

de Ayrton Mogni, que batió el RV durante tres giros consecutivos

en su afán de darle alcance al subcampeón Peruchena. Cabe

destacar que Paredes no incidió, se corrió al costado como

indica el reglamento.


A todo esto Miguel Franzoi iba por su próxima presa, un

sólido Gabriel García que no perdió la cabeza continuando con

su ritmo. Entrando en el último giro y con los tres primeros ya

habéndole sacado uno a Paredes (a Mayer le costó un poquito más)

el acoso de Mogni a Peruchena era asfixiante.


Mogni exprimió el motor y entró por afuera mucho antes que el

rojo de Peruchena, que perdía así el segundo lugar. También 

Franzoi había podido con García, los dos en los últimos dos

kilómetros y medio.


Y así tras 15 minutos 49 segundos y 056 de carrera, Lucas 

Trossero consiguió otro triunfo para su largo palmarés en la

categoría. No fue tan aplastante porque no se lo propuso, ni

necesidad tenía de castigar los fierros sin nadie a la vista.


Un soplo de aire fresco, que tanto le hace falta a la FRE fue el

segundo lugar de Mogni, el regreso de este piloto a los puestos

de importancia en un circuito que le cae muy bien.


Los otros destacados fueron Gianfranco Leon y Miguel Franzoi

como quedó dicho, si bien arribaron lejos, muy lejos (52 segundos)

de los que pelearon por el podio.


Las dos próximas serán en Concordia y tendremos la oportunidad 

de verlos de cerca y valorarlos, para que muchos se convenzan de

lo buena y competitiva que está "la formulita ésa de los motores de

Renolito" como le dicen los espectadores concordienses, que se

jactan de tener un paladar exigente (pero no corren en ninguna).


FRE -Tercera fecha - Paraná - 21/5/23  

  Semifinal a 10 vueltas      Final       a 12 vueltas        

1º     Trossero                 Lucas Trossero

2º     Mayer                      Ayrton Mogni

3º     Wertz                    Valerio Peruchena

4º     Mogni                     Ayrton Mayer

5º    Peruchena                Tomás Wertz

6º     Lozano                  Gianfranco León

7º     García                    Miguel Franzoi

8º     Buxman                   Gabriel García

9º     Baroli                 Maximiliano Lozano

10º   Paredes                   Matías Buxman

11º   Zárate                       Hernán Paredes  

EXCL.  Franzoi               Claudio Martínez 

EXCL. León                      Franco Baroli (ab.)

EXCL.  Martínez           AB Gonzalo Zárate


Récord de vuelta de la final: Ayrton Mogni en la undécima.

                                              1:18.290

Pole position: Lucas Trossero 1:37.217 (pista húmeda)


PPrincipales conclusiones de la tercera fecha: 1.

1- Es inevitable que la Fórmula se esté poblando de chasis Crespi de la

última versión (Tulia 25) que admite el reglamento, porque sus

prestaciones son muy superiores a los chasis "made in casa"


2- Parte de la ventaja de Lucas Trossero es su incansable labor en el

taller, ya que esta familia es casi, casi el alma de la categoría. La

proveedora de motores de punta, la que más cetros ha ganado, etc.


3- Sigue siendo por lejos la Fórmula más accesible de la provincia, de

las tres que conservamos, aunque también es la menos potente y con

más restricciones reglamentarias de las tres. En este detalle pareciera

estar el secreto de su vigencia -es la más veterana si tenemos en cuenta

que la Fórmula Entrerriana "arrancó de cero" otra vez- en el cuidadoso

análisis que hace su dirigencia año tras año para que no se produzca una

escalada de costos. ¡Se merece que nos detengamos por tanto tiempo a

observarlos en acción... y hasta en los aprontes, en los boxes!



Editado por Alejandro Daniel Spizzirri

Desde un informe de Andres Brinkman (Prensa APER)

Foto de portada: Hugo Barrionuevo para Prensa APER

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