viernes, 31 de diciembre de 2021

¡Feliz 2022 para la "gran familia" del automovilismo entrerriano!

 Entre medio de tantas expresiones de buenos deseos no podría faltar

la nuestra, porque la actividad del deporte motor involucra a más de

cuatro mil familias en Entre Ríos, en sus diferentes disciplinas que

durante el año que expira a duras penas pudimos reflejar (solo en parte)

porque es enorme, mucho más de lo que los aficionados pueden imaginar.

El broche de oro. Néstor Baccon (como navegante campeón de Rally), Victorio Ballay y
Javier Cuenca reciben su "San Antonio de Padua" por su labor en automovilismo
deportivo representando a Concordia. Cada ciudad tiene su propia premiación y
para los pilotos es todo un orgullo. ¡Rara la vez que distinguen a un navegante!




Para que nuestra humilde labor sea posible, es indispensable la ayuda que

fecha tras fecha nos brindan amigos, pilotos y equipos. No podemos dejar 

de lado también a los que aportaron en la colecta que oportunamente se nos

ocurrió intentar, como recurso para que esta Hoja siga estando presente en

autódromos y kartódromos. Las limitaciones presupuestarias nos alejaron

del Rally por ejemplo, al que esperamos retornar en el 2022.


Fue  (para todos sin excepción) un año difícil, que puso a prueba la capacidad

de superación de los dirigentes y organizadores. La difusión y la prensa 

sufrieron también una transformación increíble, esperada por los aficionados

durante mucho tiempo. La inmediatez de la TV, la "tiranía" de la imagen por

sobre la palabra (oral o impresa) puede brindar efectos contrapuestos, según

en qué manos se encuentre y en una de ésas, el espectador todavía no está

acostumbrado o no es consciente de que la TV es apenas una ventana, que

permite ver una parte de la realidad así como una abertura de nuestra casa

nos muestra una parte del paisaje pero nos oculta "la parte de atrás".


Mucho valoramos entonces el aporte de quienes nos permitieron decir

presente y poder brindarles nuestra visión de los eventos, desde el lugar de

los hechos. Miles de kilómetros recorridos, muchos asados, pizzas o

milanesas compartidas. Muchas noches de charla hasta la madrugada, 

bonitos lugares de Entre Ríos conocidos gracias a compartir alojamiento

con equipos, con mecánicos, con motoristas, con allegados que resultaron

ser muy buenos asadores cuando dejaron de reírse (como Mauri) y

también mucha gente nueva conocida.


Por ejemplo, haber compartido todo un fin de semana con el elenco de

banderilleros "Gualeguay Pistas" nos permitió conocer la parte humana

de estos "invisibles" protagonistas de los espectáculos. Ya le vamos a 

dedicar una nota aparte, si Dios quiere.


A los pilotos que también son mecánicos (talleristas) por la paciencia que

desde hace 16 años tienen para quien esto escribe cuando vamos a consultarlos

por un tema técnico puntual y siempre nos dedican un momento para arrojar

un poco de luz en asuntos que no dominamos. De ellos también es esta página.


Y por último, nobleza obliga, a la inumerable cantidad de espectadores amigos

que al acercarnos su visión de determinadas maniobras (observadas desde

mucho más cerca) llegaron incluso a modificar nuestra postura inicial. Sabido

es que una maniobra "parece" una cosa desde lejos, pero "es" otra muy diferente

observada desde cerca o por el propio banderillero. Su aporte es de inmenso

valor y en todos los casos, anónimo y desinteresado.


Estimo no estar tan errado si afirmo que durante el 2021 el aporte logístico de

los familiares, la presencia de la mujer entrerriana en los circuitos aumentó de

manera exponencial, siguiendo la línea de repunte de cada categoría. Algunas

de ellas incluso metiendo mano en los fierros, de la misma manera que lo

haría un aprendiz en un taller mecánico, cansados... cansadas de ser relegadas

a la función de "cebadora de mates".


Muchas de esas comprometidas familias ya "bautizaron" en el ruido motor a

sus bebés, lo que nos llenó el corazón de esperanza, porque esta es una pasión

que se transmite de generación en generación.


También por nuestros lectores alzaremos la copa y esperaremos las campanadas

del reloj, juntos nos despedimos y juntos seguiremos estando al menos un fin

de semana por mes, en lo que será seguramente un año no menos difícil, pero

lo transitaremos de otra manera tras haber caminado por la cornisa durante gran 

parte del 2021.


¡Feliz Año Nuevo para todos!

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