una accidentada final, en el Autódromo de Concordia. En esta entrada
le vamos a contar las finales con mayor detalle, por orden cronológico.
A las motos le daremos el espacio que se merecen, en una entrada
venidera. Tal vez no hayan sido un buen espectáculo las finales del
Turismo 1400, pero las motos compensaron con creces.
Las pruebas libres sabatinas fueron de Ignacio Rodríguez. La primera
empezó con un 1' 28" 560 a 130, 050 Km/h lo que se dice un tiempazo.
Sin embargo Orellana no quedó tan lejos, a 062. Tercero Pellegrini a
623.
Mejoró "Nachito" en la segunda y última PL, 1' 28" 211 a 130, 6 Km/h
Pellegrini se ubicó a 239 y también a dos décimas y fracción, David
Lound, que decidió probar amortiguadores.
En las pruebas de clasificación, como decíamos, el que mandó fue Ale
Pellegrini, 1' 28" 563 a 130,080 Km/h. Rodríguez quedó a insignifican-
tes 112, Orellana a 257 y Fabián Vinzon a 469.
Como no tuvo la mejoría buscada (6º) Lound decidió volver a poner los
amortiguadores que usó en la tanda 2 de pruebas. Lo importante fue que
en esta tanda, salieron a girar las 16 máquinas presentes. El Fiat Uno
de Gerardo Ángel estaba en los boxes, pero como exhibición, a la busca
de un comprador, pues Gerardo decidió retirarse de la actividad.
La final sabatina fue un monólogo en tono rojo. Tan rojo como el Fiat
Uno de Ignacio Daniel Rodríguez, el que lamentablemente, fue despojado
de su logro en decisión a la que arribó la autoridad, luego de cotejar los
videos de las cámaras de a bordo.
Comenzó con el piloto de la 7 en punta, queriendo escaparse de Pellegrini,
el que erróneamente creíamos se había "dormido" en la largada. No fue
así, como se verá.
Detrás del Fiat Uno azul, un trencito de tres -muy pegados- Peliquero,
Orellana- Lound, y el resto, también juntos entre sí, como en todas las
primeras pasadas. Cerraba esa vuelta inicial el sábado, Prelat a marcha
lenta. Directo a boxes, algo había quedado mal en el Fiat Uno campeón
2014 (Chano Martínez fue un mecánico más) a pesar de los esfuerzos
para que se "pareciera" a un auto de carrera luego del vuelco en la tanda
de prueba.
Sin dejar pasar oportunidad alguna, Gustavo Francois se puso quinto por
un breve lapso, superando a Lound. Un tanto más atrás, Roude, Vinzón y
el resto. Rodríguez ya acumulaba cierta ventaja, si bien no era mucha.
Para la tercera vuelta, fue suficiente la brecha con Pellegrini, como para
decir que estaba todo liquidado a favor de Rodríguez.
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Solamente éste, a cierta distancia, y D. Peliquero, parecían poder seguir
ese tren de marcha. El resto iba quedando cada vez más lejos. En este claro
"segundo pelotón" ubicábamos a Lound, Francois, Vinzón y Ricardo Bruga-
da, haciendo todo lo posible por estar cerca de esos tres.
A continuación Roude, Agustín Roncaglione, Javier Gómez, Javier Huerta.
Mucho más lejos, Daniel Martínez y más atrás, Leonardo Roncaglione,
quien estaba debutando, al igual que quien cerraba, Facundo Arovi. Fue
la cuarta vuelta la última que pudo hacer el fin de semana Leonardo, que
desertó y no tomaría parte de la prueba al día siguiente. Prelat regresó a
pista.
La novedad de la tercera ronda había sido el avance de Brugada sobre
Roude, que reeditaron el "clásico" de la fecha anterior. Aunque Ud. no lo
crea, volvió el "pasame que te paso". No pregunte como terminó.
Y en la cuarta, Peliquero parecía amenazar a Pellegrini, "lo tenía en la
mira" como dicen en la tribuna. El segundo pelotón se volvió a juntar,
tras una pequeña separación entre sí. A Peliquero lo seguían Orellana,
Lound, Francois, Vinzón, Brugada y Roude ¡uno detrás de otro!
Apenas unos cuarenta metros detrás, Roncaglione versus Huerta. Entre
éstos y el siguiente dúo se metió Prelat con un giro menos. El retornado
Javier Gómez (Fiat 147) había sido alcanzado por el modesto 128 del
"Negro" Martínez. Facundo Arovi completaba el clasificador en esa cuar-
ta vuelta.
Peliquero dejó de ser amenaza concreta en la quinta. Pasaron Nacho, Ale,
Peliquero, Orellana...Francois como jamón del medio... Lound, Vinzón y
Roude en trencito. Más atrás seguían Roncaglione versus Huerta...solitario
pasaba a continuación Brugada, también Prelat, continuando Gómez y Mar-
tínez su lejana disputa, cerrando Arovi.
Martínez entró pasado, como si tuviese problemas para detener el 128, pisó
el piano interior de la última curva, quedó en dos ruedas, al borde del vuel-
co. Un aviso de lo que sucedería cuatro vueltas más tarde.
Para la sexta vuelta la merma de Peliquero se acentuó ¡Orellana pasó a ser
el tercero en pista! Justo cuando se venía lo mejor del "Puma", deben redu-
cir la marcha por el ingreso del A.S. Con el capó levantado en algún roce,
pasó en la hilera Gómez, detrás de Martínez, aunque no teníamos la certeza
si el sobrepaso fue válido.
El séptimo giro entonces, fue detrás del pace car, en este orden. Rodríguez,
Pellegrini, Orellana, Francois, Lound, Roude, Vinzon, Roncaglione, Huerta,
Brugada, Prelat (con un giro perdido) Martínez, Gómez y Arovi. El que
faltaba era el Duna amarillo de Daniel Peliquero.
En la octava, siempre con el cielo nublado que pareciera perseguir a la Copa
este año, se reanuda la carrera, y Rodríguez vuelve a tomar distancia. Era
el mejor, sin dudas.
Envalentonado, Fernando Roude quiere pelearle la recta a Lound. Éste fue
apareado por Vizon, que cerraría bien la maniobra. fue el único momento de
esta final e que se lo vio a Francois circular tercero.
La bandera verde le hizo apretar de más el acelerador a Prelat, trompo. La
novena vuelta traía todas estas novedades, y más...
Ya habían pasado los punteros, ya había pasado el trío Vinzón- Lound-
Roude. También lo habían hecho Roncaglione y Brugada, en un duelo
aparte. Y de pronto, el brutal e inconfundible sonido de un choque ¿Qué
había pasado? Daniel Martínez embistió de lleno a Javier Gómez. Para
desstacar el gesto del joven piloto, bajándose del auto y yendo al 128
para constatar que el veterano colega esté en buenas condiciones. En la
foto 2 está regresando hacia su unidad, mientras el líder Rodríguez se
apresta a cumplir la vuelta 10.
En el interín, hubo un sobrepaso no válido de Orellana a Pellegrini, que
se corrigió de inmediato. Otro paso más, y ante la imposibilidad de despe-
jar la pista, también el último giro fue detrás de A.S.
En total, siete giros de carrera y los restantes cinco tras el pace car, no
fue lo que se dice una carrera apasionante, y el saldo de tres autos menos,
dejaban con 13 a la cuarta fecha del día siguiente.
"Y ENNN ESTE RINCÓNNN...EL (EX) CAMPEÓNNN"
Confirmado en la mañana del domingo: No serían de la partida, Martínez
(obviamente) Javier Gómez, ni Leonardo Roncaglione, el hermano de
Agustín, que debutara con un Fiat 128 similar. Apenas un poco más rojo.
Además, conocimos el dictamen de las autoridades, que otorgaron el
triunfo del día anterior a Pellegrini. De esta manera, el ex futbolista accedió
a su primer triunfo, en tanto que para Facundo Daniel Pierini fue el primer
éxito como motorista. El "valor agregado" de este éxito, es que pocos cono-
cen que Alejandro pasa tardes enteras trabajando a la par de los Pierini en
el taller del Barrio Juan XXIII.
El trámite de las series, ya fue narrado en la anterior entrega. La primera
para Rodríguez, la segunda para José Orellana, mucho más suelto con el
Fiat 147.
Señal de largada y ¡Zas! Volvieron a las andadas los muchachos. Rodríguez
se quedó sin pista. "Elegí pasar por afuera para no arriesgarme, pero igual
me tocaron". Al ganador de la batería, luego le tocó doblar a la par del áspero
Roude, que no tardó en atacarlo, creyéndolo herido, cuando solamente había
recibido "un golpe bajo", digamos, se encontraba en cuenta de protección.
Orellana sacó provecho de tantos ímpetus desatados a la misma vez, tomando
cierta distancia, Peliquero y Pellegrini lo seguían.
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Divididos en grupos quedaron, lo que es raro en un primer giro. (a cumplirse)
Rodríguez, Roncaglione, Lound, Prelat,...seguían pasando...Arovi...apareció
muy retrasado Francois, y Vinzon a boxes. De Brugada ni la punta de su bar-
ba tipo pìrata Morgan.
Los estaba esperando en la curva 1 el A.S. porque el equipo de rescate tuvo
una tarde como para pedir aumento de sueldo. Mientras retiraban al Fiat Uno
de Ricky, en boxes reparaban el Fiat de Vinzon, que gracias a este pequeño
"regalito" de los dioses (A.S. lentísimo) perdió apenas una vuelta, si bien tu-
vo que empezar "de cero", último, siendo una de las tareas descollantes de
esta final. Nos guste o no su estilo.
Pasan detrás del pace car y de once se reducen a nueve los autos participantes.
Prelat ingresa a boxes (saldría) y Javier Huerta hace lo propio, para evaluar
los daños en su Fiat Duna. Entretanto, cumplen dos, tres vueltas con A.S. y
entre bostezo y bostezo, a muchos se les habrá cortado el hipo al ver los
daños en las dos máquinas plateadas, las de Brugada y Roude (en tres ruedas
quedó el del piloto de La Bianca). En este otro collage mostramos el de
Ricky.
Con lo justo antes de perder otra vuelta más alcanza a salir Huerta (el radia-
dor quedó afectado) pero de todos modos.. ¡Ni a marcha moderada pudo se-
guir en pista Prelat! Volvió a ingresar a boxes, esta vez para abandonar. No
hubo caso, seguían diez, y pronto serían nueve.
Mirábamos las crucecitas que hacemos en la libreta de apuntes, iban cuatro
vueltas y el A.S. "se quedó a vivir". En la quinta al fin se retira, agitándose
la bandera verde.
Los cuatro primeros aceleran formando un cuarteto. Orellana, Peliquero,
Pellegrini y Rodríguez. Una vuelta después, contamos a los sobrevivientes.
Quinto Lound, luego Francois, Roncaglione y Vinzón, formando otro, que
no era cuarteto porque David se les iba alejando. Su mirada estaba puesta
en los de adelante, para que no se les vayan demasiado. El ausente en este
giro fue Javier Huerta.
Controlaba sin mayores sobresaltos al impetuoso Peliquero, el ex campeón
José Orellana, que no pareciera sentir ningún acoso. Estos dos se cortaron
de Pellegrini, que a su vez controlaba a Rodríguez.
En un solo giro, Fabián Vinzon (una proeza si tenemos en cuanta que entró
a boxes) dio cuenta de Roncaglione y Francois, dejando a los 128 que diri-
man lo suyo ahí atrás.
La otra nota importante era el acercamiento de Lound, cada vez más cerca
del tándem Pellegrini- Rodríguez. Por lo que en la octava, la cuarta final
del año tuvo otra "caída de estantería".
David Lound pasó tercero, sorpresivamente. Fabián, delante de Rodríguez,
mientras que Pellegrini no pasaba. Había sido víctima, primero de un leve
roce, y posterior toque en la curva siguiente, que lo hizo volcar "en cámara
lenta" por lo que quedó con el lateral izquierdo contra el piso. Rompió el
policarbonato del lado opuesto para salir. Los raspones se aprecian en el
collage. Terminó mal la carrera de quien había ganado el día anterior, y
en ésta tenía el podio asegurado.
Lo insólito fue ver que a los Fiat 128 no les ocurría nada. Así, en la novena
pasada, anotamos: Orellana, Peliquero, Lound (que lo atacaba) Vinzon, Na-
chito, Francois, Roncaglione y Arovi. Antes de terminar la lista, había ingre-
sado por segunda vez el A.S.
Tras el décimo paso a marcha reducida, la acción regresó en la undécima
ronda. Es decir faltaban cuatro para que Peliquero logre el pod...No pudo
ser, quedó último ¡Otro toque!
Tras este último "golpe de nocaut" el "invicto" (en toques) José Orellana
tenía solamente que recorrer los últimos cuatro giros de carrera. Ignacio
Rodríguez no estaba cerca para inquietarlo. Tercero había quedado Lound,
seguido por Roncaglione, Francois, Arovi y Vinzon, muy retrasado. Como
un fantasma amarillo apareciendo en el curvón interno, Peliquero asomó
octavo.
Por supuesto que el Fiat Uno blanco de Vinzón dio rápida cuenta de los
128 de Roncaglione y Francois. Lo que no estaba en los papeles de nadie
evidentemente, era que Gustavo recupere el lugar ante el Fiat Uno, en la
duodécima ronda. La misma en la que Peliquero dejó otra vez noveno y
último a Arovi.
Quedaba muy poco para recuperar terreno, con los de adelante dispuestos
a respetarse y llegar. Francois se desquitó y se quedó con el quinto lugar.
Vinzon perdió, aunque la "pica" era solamente para la tribuna, por la vuel-
ta que perdió Vinzon en boxes.
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La última acción para recordar, será la estéril persecución de Peliquero,
que terminó a lejanos siete segundos de Francois. Una vez más, Daniel
fue el gran perdedor de la tarde.
Como saldo de esta doble jornada, diremos que en primer lugar, Orellana
sumó puntos para pasar al frente, Lound (2º y 4º) también sumó lindo. El
balance de Rodríguez lo dejó muy satisfecho, porque el objetivo es bien
alto, y estos dos buenos resultados (4º- 2º, como Lound) lo hacen acercarse
a dicha meta, que es el campeonato. Se emparejó arriba, se produjo una
sana rivalidad entre los Fiat 128. Hubo 16 y quedan varios autos más a los
que les estaría faltando "un último empujoncito" para poder presentarse.
El saldo negativo es la alta cantidad de máquinas rotas. Pareciera que al Sr.
Comisario Deportivo (Sr. Daniel Pinget) se les desbordó el "ring". No hay
forma que los muchachos se respeten. Lo bueno, dentro de la desgracia
-para todos menos para los chapistas, que se frican las manos- es que se la
bancan, no hubo problemas de conducta "debajo" de la pista.
No obstante, como decíamos el comienzo, solamente para los de paladar
negrísimo fue un espectáculo aceptable. Con total seguridad, las motos,
las Superbikes, calmaron la sed de los espectadores, porque de carrera en
sí, el Turismo 1400 Std. muy poco.
"Final, final, final. La campana final los llamó a sosiego", como decía el
inolvidable Osvaldo Cafarelli los sábados por la noche , desde el Luna
Park. ¿Exagerado? Mire las fotos y calcule los costos.
@AleSpizzirri (texto y fotos)
Nota: el marcador de esta final se publicó ayer.
Collage 4 : Arriba, El Fiat Uno de Ricky Brugada
Abajo iqz. lateral raspado del Uno de Pellegrini.
Abajo der. El techo del Uno de Héctor Prelat.
Collage 5 : Arriba, un motor de los que arma Facu Pierini.
Abajo: Desarmado por completo ayer en la Técnica
(foto de Nicolás Alejandro Pierini, Facebook)
Derecha, un año atrás, Facundo armando uno de
los cuatro motores que hizo.
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